40 días y 40 noches.

Día 9: Karin.

Él la observaba dormir. Tantas veces que lo había hecho... era casi como un pasatiempo haberlo hecho... ella se veía tan hermosa, tan apacible...

- Hmm... 😴- se movió levemente para quedar boca arriba, estaba soñando al parecer.

Se sentó al borde de su cama y acarició su rostro.

- Dime qué hice mal Kari?- el joven se acercó al rostro de la muchacha. - por qué dejaste de quererme?

- Fi... rem...- dijo entre sueños la Sarutobi.

Naoki resopló con fastidio.

- No tenías que ser tan específica... 😒

- 😴

El joven iba a alejarse de ella, pero la castaña en un acto reflejo lo agarró del cuello y juntó sus labios con los de él. Naoki abrió los ojos de par en par. Ella aún seguía dormida, pero lo besaba con amor y dulzura.

Naoki no opuso resistencia y le correspondió, pero con más pasión.

" Hmm, es casi como si fuese real..." pensaba Karito semiconsciente. "Un minuto... esta forma de besar..." .

Karito abrió los ojos y casi le da un infarto al ver que tenía bien agarrado a Naoki.

- Mierda Naoki!!- la Sarutobi se alejó de él de inmediato, pero del impulso terminó cayéndose de la cama, quedando sus piernas arriba de ésta y toda su espalda en el suelo. Dignidad: cero...

- Wow, ya sabía que mis besos te volvían loca, pero no sabía que tanto.- le dijo el pelinegro burlón.

- Qué rayos haces aquí?!- la castaña se reincorporó de inmediato. - o mejor dicho... cómo entraste aquí?!!

- Pues, adivina quién es el nuevo y flamante Maestro de Llaves?- le mostró su brazalete completamente negro.

La Sarutobi lo observó sin poder creerlo.

- Aprovechaste la situación... típico de ti 😒.

- Oye, yo solo vine a velar por tu seguridad, no es mi culpa que tu cuerpo aún tenga ganas de mí 😉.

- Sí como no 🙄. - expresó la Sarutobi con tono aburrido.- Ahora... me harías el favor de retirarte? 😒.

- Bueno, aparte de venir a ver si estabas bien, también vine a buscarte.- dijo el muchacho poniéndose las manos en los bolsillos.

- A buscarme? Para qué?

- Tenemos otro muerto...

Karito abrió los ojos con asombro.

- Quién?!!- preguntó intrigada.

- Sai...

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Tsubasa estaba hecha una furia e Itachi hacía hasta lo imposible por tranquilizarla.

En ese instante, llegaron Karito con Naoki. Firem no pudo evitar mirarlos de reojo al verlos juntos, aunque varios los notaron, después de todo, el pelinegro era el que faltaba.

- Hasta que llegaste, Naoki.- le alegó Tsubasa, quién también notó al par.

- Lo siento. Estaba ocupado. - dijo el joven sin más.

- Mira tus aventuras con Sarutobi me tienen sin cuidado, eres el nuevo maestro de llaves así que compórtate como tal. - le dijo la rubia molesta.