Esmeraldo | KookMin

09

Jungkook, tú ¿de casualidad escuchaste la conversación que tuvimos mis padres y yo?

Llevaba en mente esa pregunta todo el tiempo, había querido responder con sinceridad porque después de todo no quería ocultarle nada a JiMin pero en ese momento no pudo, un - No entiendo, ¿de que conversación me hablas? - fue lo primero que salió de su boca, no lo había pensado bien, quizá debió decirle la verdad a JiMin, no debió ocultarle que realmente si había escuchado todo y estaba muy nervioso pero también preocupado por eso.

Que habría pasado si le decía a JiMin que si había escuchado su conversación, ¿será que él tendría la confianza para contarle lo que sucedía? o en su lugar se enojaría con él por escuchar algo que no debía. No quiera arriesgarse a eso, al final JiMin solo le dedicó una sonrisa y siguieron conversando sobre cualquier cosa que no fuese ese tema, situación que no duró mucho porque Jeon tenía que volver a trabajar.

Unas semanas después; eran pasadas las 10 de la noche y Jeon se paseaba por todo el hospital haciendo sus rondas nocturnas, nada más le faltaba ver cómo se encontraba el señor Lee Min-Ho quien había llegado a causa de presión arterial baja, provocándole un desmayo, luego de eso se iría a descansar un poco, bueno lo haría si no aparecía alguien de emergencia con un hueso salido o algo peor, y pensar que la última vez que atendió un caso tan grave de emergencia fue cuando vio a aquel chico rubio en esa camilla al borde de la muerte.

Y no es que no llegaran casos de emergencia al hospital, todos los días estando o no de turno podía ver cómo entraban personas al borde de la muerte por esas dos amplias puertas. Muchas personas lograban salir con vida pero muchas otras no y eso para él era lo más difícil, ver partir o perder a algún paciente, sentir la impotencia de no haber cumplido bien con su deber, pero así era la vida no se puede evitar la muerte

Así que su impresión fue grande cuando vio a ese chico de hermosos cabellos rubios llegar en  ese estado, siempre se preguntaría ¿Que es eso tan malo que ese chico hizo para que lo atacarán de esa manera? o que hizo bien y por esa razón tiene algún enemigo, tal vez había estado en una pelea callejera o trataba de defender a alguien ¿será que ahora sí estaba totalmente fuera de peligro?

Tenía toda la intención de averiguar que pasaba pero por otro lado no quería entrometerse en algo que no le compete, Pero JiMin ahora era su amigo y quería ayudarlo de todas las maneras posibles, no quería que nadie volviera a hacerle daño. Todo esto tenía en su mente hasta que llegó a la habitación del señor Lee.

- Buenas noches señor Lee - entro Jeon saludando mientras hacía una reverencia y se colocaba a un lado de su cama - ¿cómo se encuentra?

- Me he sentido bien muchacho, esperando a que me dejes ir de aquí - decía mientras tomaba de las manos a Jeon - ya ha venido el enfermero a tomar mi presión, incluso tomo mi temperatura y estoy bien, soy un hombre fuerte.

Jungkook rio por lo bajo y le dió una mirada al señor mientras le daba un leve apretón a sus manos para tratar de reconfortarlo.

Atender pacientes cómo él era todo un reto a veces, los señores mayores siempre se hacían los fuertes y no mostrar debilidad en ningún momento unos por terquedad y otros por temas de orgullo o ego, pero él tenía toda la paciencia para tratar con ellos con todo el cariño que se merecían

- Yo se que usted es fuerte, pero comprendame un poco - decía con una sonrisa en sus labios - yo no puedo dejarlo ir de aquí hasta que no sepa que está completamente bien y ya no le dará un susto más a sus familiares que tanto lo quieren.

El anciano finalmente se resignó y dándole una sonrisa y agradecimientos a Jeon se despidió de él cuando esté salió de su habitación.

Su ronda había terminado finalmente y ahora sí tenía oportunidad de descansar un poco antes de comenzar a elaborar un reporte de todo lo ocurrido en parte de la noche y la madrugada para entregarlo antes de su salida a la mañana siguiente.