Capítulo 9

13 1 0
                                    

William
Me estoy vistiendo para la cena con mis padres, mi hermano Alaric y mi hermana Sara, cuando estoy abrochándome la camisa blanca, mi teléfono suena. Es Christian. Inspiro y espiro varias veces, me armo de valor y lo cojo.
—¿William? -murmura Christian y su voz suena completamente destrozada. Inmediatamente sé que ha pasado algo, algo grave.
—¿Estás bien? -susurro preocupado.
—Olvidemos por esta noche toda la locura de vida que llevamos -solloza—. Por favor, Will, quiero verte, necesito verte,
Me quedo mudo, no sé que decir, ni qué habrá pasado, pero quiere verme y está llorando. Intento articular palabras pero no puedo.
—Por favor, di algo -insiste y puedo sentir su desesperación.
—¿Dónde estás? -digo nervioso.
—Cerca de tú nuevo piso -murmuro—. Me puse a conducir y acabé aquí en una plaza cercana.
—Ven a mi piso -le digo y me doy cuenta de que estoy llorando.
—Gracias -susurra y cuelga.

La presión por reunirme con mi familia desaparece, es más no creo que asista a la cena. Mi hermano, Alaric es el niño perfecto y nunca ha estado con nosotros. Mi madre es una obsesiva con las carreras universitarias, mi padre inexistente y Sara, después de todo lo que pasó... no tenemos relación. Aunque ahora mismo, lo que ronda por mi cabeza es Christian. El timbre suena y mis nervios se disparan. Camino con endereza hasta la puerta y la abro, ahí está él, delante de mí, igual de guapo que siempre, con los ojos rojos de llorar y como no, con sangre en la ropa. Y aún así sigue siendo perfecto, ahí me doy cuenta de que estoy completamente enamorado de él. Christian me mira, sus ojos se vuelven vidriosos y se lanza hacia a mi y nos abrazamos, con fuerza, es un abrazo largo y fuerte.
—Gracias por dejarme venir -solloza con el rostro hundido en mi hombro.
—No las des -inconscientemente le beso la sien con ternura.
Entramos al salón y nos sentamos en el sofá, me mira con pasión, nunca nadie me ha mirado así.
—Sé que este no es el reencuentro que esperabas pero necesitaba verte.
—No hace falta que hablemos -susurro.
Christian se muerde el labio a la par que aprieta los puños. Rompe a llorar. Le rodeo con mi brazo y lo apoyo en mi pecho.
—Eres lo mejor que me ha pasado en la vida -murmura.
Christian y yo nos miramos fijamente, esbozamos una sonrisa y nuestros labios se acaban fundiendo en el beso más apasionado que nos hemos dado. Christian se aparta y me mira. Se disculpa.
—No te preocupes -susurro nervioso—. ¿Tienes hambre?
Christian asiente.
Me levanto y me dirijo a la cocina, meto en el horno dos pizzas y espero a que se hagan. Mi teléfono vibra de nuevo, mi madre ha creado un grupo para la familia. Ha escrito un texto enorme en el que se disculpa y promete que quiere ser una mejor madre y que mi padre estaré más presente y que esta cena puede ser el inicio de una verdadera familia. Tras leer el mensaje pongo los ojos en blanco y mando un mensaje al chat; <<Yo ya tengo una familia>>. Seguidamente salgo del grupo. Saco las pizzas del horno y vuelvo al salón, Christian me recibe con una sonrisa.
Él es mi familia, eso es lo que quiero, una familia con Christian.
—Sé que es abusar de tú hospitalidad Will, pero, ¿me puedo quedar a dormir?
—Por supuesto -esboza una sonrisa.

Dejo las cosas encima de la mesa, ya las recogeré mañana. Subimos a la habitación, mientras Christian abre la cama, yo me quito la ropa hasta quedarme en bóxers. Él me pregunta si le parece incómodo que duerma en bóxers también, le digo que no. Nos metemos dentro de la cama, le acaricio el pecho con mis dedos, no podía resistirme más. Christian me mira y sonríe, aunque su mirada me grita que lo siente, que siente todo lo que ha hecho. Me acerco a sus labios y lo beso, esos labios son lo más dulce que he probado en mi vida. Su lengua juguetona entra en mi boca con cautela, le permito que entre y en segundos nuestras lenguas juegan a las par que acariciamos el cuerpo del otro.
—Tenía muchas ganas de volver a estar a tú lado -murmura nervioso.
—Yo también -le respondo y le beso de nuevo.
Christian comienza acariciarme el pelo y me quedo dormido contra su pecho en unos minutos.

Tú, Yo & El Verano  [Chicos Malos 3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora