—ANGIE.El día había transcurrido lento, el viento frío de la tarde chocaba en mi rostro, haciendo que mis mejillas y nariz se pongan rojas, que el maquillaje oscuro resalte mi piel pálida. Me abrazaba a mi misma para obtener un poco de calor, ya que la campera de cuero no abrigaba demasiado.
Me encontraba fuera del departamento fumando un cigarrillo, había despertado con una gran jaqueca de anoche. Mi hermano cómo siempre no se encontraba en casa, así que tuve que desayunar sola. Poco después me cansé de estar encerrada un domingo así qué salí a fumar un cigarrillo en medio de la escalera que daba a dirección de mi departamento.
Estaba sola, no tenía nada que hacer hoy. Tampoco trabajaba, pero si tenía que hablar de lo que pasó ayer con mi jefe. Tendría que aclarar un par de cosas, pero no me apetecía que sea hoy, me sentía del carajo.
Estaba concentrada en un punto fijo, hasta que una niña llama mi atención. Se encontraba tomada de la mano con sus padres, algo que a mí no pudo durarme mucho. Mis padres se separaron, cuando apenas tenía 5 años, poco a poco dejé de verle la cara a papá, mi mamá se casó con el imbécil de brian y se olvidó que tenía hijos. Envidiaba a aquélla niña, tal vez ella no se de cuenta de que tiene que aprovechar mientras pueda, por qué para algunos la felicidad solo dura poco, y si tienes suerte la consigues y dura para toda la vida.
Mi vista cayó al suelo, luego de varios minutos tomé valor y me levanté de el lugar para dirigirme a ningún lugar particularmente, solo comencé a caminar las calles de los ángeles, mientras el sol se ponía naranja y estaba por desaparecer.
Me gusta caminar sin algún rumbo a donde ir, no sabes a dónde te llevará la vida y tampoco tienes pensado a dónde ir. Aunque eso es lo que me aterra en cierto modo, no se realmente en donde estoy varada. ¿Seguiré siendo una stripper para toda la vida?, Tal vez eso está escrito para mí.
—¿Pasas por mi casa y no saludas? —estaba tan metida en mis pensamientos que nisiquiera me di cuenta que el bajista estaba parado en el balcón de su departamento fumando un cigarrillo, me paré y lo observé desde abajo—¿Que modales son esos Angie?
Reí un poco—No tenía idea que estaba por aquí—respondí y nikki frunció el ceño.
¿Acá es a donde me había llevado la vida?
—Sube—Me pidió, yo dudé un poco pero ¿Que se supone que tengo que hacer? Nada, así que me apresuré para subir hasta llegar a él.
—¿Disfrutando la vista?—pregunté al llegar y ver como el sol estaba por esconderse, y teñía a las nubes de color naranja.
El me miró—Ahora sí la disfruto.
Yo reí un poco sonrojada por tal piropo, Nikki me ofreció de su cigarro y yo acepté gustosa.
—¿Que hacías caminando sola?—me preguntó
—Me gusta caminar sola—Respondí dándole una calada al cigarro.
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ANGIE━Nikki Sixx
Fiksi Penggemar"Ahora escucha, Ella es afilada si no encuentra su camino te partirá en pedazos. Ahora está oscuramente calmada, se mueve como un gato, si no entras en su juego, bueno, puede que no regreses, ella tiene miradas que matan."