El hermano de mi mejor amiga.

Capitulo 10.

Estaba bailando con Jaden. Me pareció que la canción era de Elvis Presley, pero no estaba segura.

Happy 50's  estaba lleno de gente que tomaba batidos y bailaba al ritmo de la música, Jaden y yo estábamos entre ellos haciendo lo que podíamos tratándose de Rock n' Roll.

-Esto es lo mas divertido que he hecho desde hace mucho tiempo - dije mientras Jaden me daba una vuelta y luego ponía una mano en mi cintura.

-Me alegro - se acercó mas a mi, nuestros labios labios estaban separados tan solo por centímetros y me habló al oído - para mi todo lo que hago contigo es divertido. Todo es mejor cuando estás tu.

Lo miré a los ojos y pude sentir como sus ojos me atravesaban y como su respiración se aceleraba mientras se acercaba lentamente a mis labios.

-Katy - me dijo en un susurro - Katy - repitió.

Me sacudieron el hombro.

-Katy - abrí un ojo y pude ver a Tyler en pijama, vi el despertador : 6:30am - ¿Quien es Jaden? - sonrió burlón.

-Cállate ¿Si? - enterré mi cabeza en la almohada para tapar mis mejillas probablemente enrojecidas.

Me levanté y tropecé con la alfombra dejando mi mejilla pegada al suelo de madera. Putas mañanas.

Arrastré mis pies hasta el baño, al parecer soñar con Jaden me dejó radiante. No había sombras oscuras bajo mis ojos y el color chocolate de estos parecía mas brillante.

Intentaría soñar con el mas seguido.

Me salí de la ducha y me puse unas  calzas engomadas de color negro una polera holgada que me tapaba la mitad del trasero y unas zapatillas negras con plataforma, tomé mi bolso y bajé corriendo las escaleras para desayunar. Aunque aún me quedaba tiempo.

Sonó el timbre de la casa. Que extraño, ¿Quien sería a esta hora?

-Buenos días princesa - dijo Jaden apoyado en el marco de la puerta.

-Jaden - me sacó una sonrisa verlo, debía admitirlo - ¿Que haces aquí tan temprano?

-Pensé que sería una buena idea invitarte a desayunar - asentí salí cerrando la puerta tras de mi.

Me abrió la puerta del coche y subí. Era tan caballero, y me encantaba.

-¿A donde vamos? - le pregunté ansiosa.

-Happy 50's  - me miró sonriente - ahí tienen los mejores desayunos.

Estaba feliz. Jaden era soñado, me respetaba, le importaba como estaba, como me sentía. Todo lo contrario a Adrian, que pasaba de mi totalmente. Al menos hasta hace una semana.

-¿Que desean para desayunar? - preguntó una chica de unos veinte años en su vestido rosa con delantal mientras lanzaba miradas coquetas a Jaden que el ni siquiera notaba.

-Dos menús especiales, por favor - dijo Jaden mirándolo solo por unos segundos para después volver a mirarme.

-¿Esta vez si me dejaras pagar lo mío?- pregunté esperanzada.

-No tienes remedio - negó sonriendo - Y no, yo pago.

-Ugh - me quejé y fruncí el ceño. El puso en dedo entre mis cejas para borrar la arruga que se formó entre ellas.

-Mira, eres hermosa - dijo apartando el dedo cuando mi cara se relajó - pero cuando haces eso solo te ves demasiado guapa. No lo hagas.

Llegó la chica con una bandeja con nuestro desayuno. Había dos batidos de chocolate, dos muffin de chocolate y dos platos de huevos con tocino.