VIII

1.5K 153 25
                                    

Lamentablemente, el hacerle frente a mis errores era sólo la primera parte. 

Para recuperar a Felix, debía luchar por volver a ser de confianza; demostrarle que no lo dejaría de nuevo por sólo una confusión y complejo que yo mismo me planté. 

Siendo sincero, el sólo hecho de que Felix me escuchara, ya era demasiado. 

El que me diera la oportunidad de frecuentarnos y arreglar las cosas, fue un milagro. 

Pero, ¿Acaso no era eso mi unión con Felix? Un milagro que se dio sólo porque Felix así lo quería... Porque me dio la oportunidad. 


El sabor agridulce sigue ahí, me sigo culpando cuando caigo en desesperanza, pero es menos frecuente. Hago lo posible por mostrar mi sinceridad. 

Incluso, aún cuando antes me había mantenido lejos de las fotos artísticas de Felix, poco a poco fui involucrándome en lo que le gustaba. 

Fotografías en ángulo, con prendas que dejaban poco a la imaginación. 

No tengo idea de cómo el fotógrafo regular de Felix podría mantener su línea profesional

Felix es, en exceso, sensual. 


Quizás fue por eso que las cosas se dieron más rápido de lo que tenía planeado. 

No me malentiendan, sí demostré cuánto me importaba Felix de manera melosa. 

Lo iba a buscar, cuidaba de él y lo invitaba a lugares frecuentemente. Pero, sinceramente hablando, aquello que nos alejó fue la sexualidad.

¿Tal vez la respuesta estaba en eso mismo? 

Incluso si no es así, tampoco tengo mucho tiempo más para pensar. 


Quiero decir, Felix se va a despertar pronto. 


—Hmn... ¿Qué hora es? hablando del Rey de Roma. 

—Aún es temprano, ¿Quieres que te prepare algo? 

No resisto el impulso de besar su hombro desnudo, apreciando el mar de marcas que dejé en su nívea piel. 

—Mñññ, por favor.

Riendo contra sus labios, le doy un beso de buenos días. 

No hace falta decir que luego de la sesión de fotos pasamos la noche juntos, ¿cierto? 

Por supuesto que no. 

Con una sonrisa, preparo el café que tanto le gusta a Felix, junto a unas tostadas francesas para variar un poco. 


Ni diez minutos más tarde, vuelvo a la habitación en busca de respuestas. 

— ¿Con quién hablas, bebé?

— ¿Hmn? Ah, con mi fotógrafo. 

Mantengo la queda sonrisa en mis labios, asintiendo mientras le sirvo el desayuno en la cama. 

Entonces decido ignorar deliberadamente aquel mensaje que alcancé a leer.


« Volví con el rubio, tendremos que juntarnos otro día »


Sí, bueno...

Felix dice que es el fotógrafo. 

Ex › 𝐇𝐲𝐮𝐧𝐥𝐢𝐱Donde viven las historias. Descúbrelo ahora