Peter

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—Niño —llamó una voz conocida desde el sofá—.

—Si, ¿Señor Stark? —cuestioné a mí "jefe", por así decirlo. Trabajo con él, no trabajo para él. Suelo ser muy respetuoso con el Sr. Stark, ya que no quiero que me quite lo bueno que tengo.

Estoy en un internado para los demás, pero en realidad soy Spider-Man y trabajo con él en las misiones que tiene. Una vez le quité el escudo al Capitán América, un gran dato curioso.

—¿Tú sabes que tengo una hija? —hizo una pregunta a la cual me quedé muy sorprendido y casi sin palabras. Nunca mencionó nada sobre una hija o algo por el estilo. No sabía si el mundo lo había sabido o si era un secreto, absolutamente nada.

Levanté mis cejas y al instante me confundí. Arrugué el ceño y lo miré con extrañeza.

«¿Tony Stark tiene una hija?»

—No me mires así. La tengo. Y fue un error de cuando era joven —confesó fácilmente—. Aunque haya sido un error, no me arrepiento para nada en absoluto respecto a ella.

—Yo... No tenía idea. ¿Alguien más sabe sobre esto? —interrogué inocentemente—.

—Sí, se solía hablar mucho cuando nació, pero luego se hizo normal y bueno, no es nada del otro mundo.

Decidí no responder nada y esperar a que me siga contando. Básicamente fue algo muy nuevo para mí, ya que nunca me habría imaginado sobre una pequeña Stark.

—Tiene tu misma edad, e irá contigo a la escuela.

Esta situación se puso un poco más seria, ya que relajó sus brazos en sus rodillas y acercó su cara a mí. Me miró con una cara bastante amenazante, pero nada que me haga asustar.

—¿Cuidarás de ella, entendido? Es lo más valioso que tengo de mi familia y tú lo más valioso de mi trabajo. Trabajarán juntos, no en conflictos, en la escuela. Así que el lunes la buscarás, se llama Lucy. ¿Está bien?

Esa charla fue un poco rápida. ¿De la nada existe una chica a la cual nunca le había visto la cara y tampoco sabía que existía y el Sr. Stark me pide que cuide de ella? Quiero decir, ahora tengo algo que hacer siempre, supongo.

«¿Tendrá un traje o algo por el estilo?»

—Está bien... —solo obedecí y me crucé de brazos. Dejé que Stark siga con lo suyo—.

—Y nada de ocultarme cosas o algo por el estilo, ¿okey? Me dices todo lo que ves —«Entiendo que seas su padre y pues quieras que la cuide, pero... ¿Decirte todo lo que hace? Sr. Stark, ¡no tiene privacidad!»

—Espera... Eso es demasiado. ¿Tengo que estar como un espía todo el día mirando qué hace? ¡No quiero hacer eso! Sería una especie de acoso —me quejé—.

—Es posible. Está bien. Solo cuidarás de ella, pero si le pasa algo grave o tiene problemas en la escuela me dices. ¿Sí?

—Eso me parece mejor —finalicé—.

Poco después de esa charla, el Sr. Stark me dejó en mi casa. Apenas llegué me puse a buscar sobre "Lucy Stark". No había nada. El mundo sólo sabía que Tony Stark tenía una hija, pero pude notar que el Sr. Stark nunca dio detalles.

Me puse a pensar en esa mujer. No había muchas imágenes, solo era una mujer rubia y no había más detalles. Las fotos de los paparazzi que había eran de su espalda.

«¿Por qué la habrá dejado?... O ella a él...».

(...)

—Tía May, hoy es el primer día de escuela, recuerdas? —pregunté haciéndolo sonar un poco obvio—.

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