𝙈𝙞 𝙥𝙚𝙤𝙧 𝙙𝙧𝙤𝙜𝙖 𝙚𝙧𝙚𝙨 𝙩𝙪́ || 𝘾𝙤𝙗𝙧𝙖 𝙆𝙖𝙞

𝐂𝐚𝐩 38

𝐋𝐢𝐞𝐬𝐞𝐥

La noche del baile de graduación llegó, y después de haberme imaginado esta noche cientos de veces ninguna de las cosas serían como creía.

—¿De verdad que voy bien?—le pregunté por vigésima vez a Aisha con quien hacía videollamada.

—Estás genial—volvió a repetir—. Además aunque fueras en pijama estoy segura de que Eli te seguiría viendo como la chica más hermosa del mundo, está muy enamorado de ti, hasta cuando Moon le habló te prefirió a ti, y eso que Moon era su crush desde hace mucho tiempo.

—¿Crees que le siga gustando?—pregunté.

—¿Acaso escuchas cuando te hablo?—cuestionó incrédula.

—Sí, sí, perdón—dije.

—¡Liesel!—se escuchó como mi padre me llamaba desde abajo—. ¡Ha llegado Eli!

—Ahh, ya está aquí—dije sacudiendo mis manos, ni si quiera sabía porque estaba nerviosa, era Eli.

—Bien, hablamos luego—dijo y luego cortó la llamada.

Me miré una última vez en mi espejo, llevaba un vestido azul clarito que era ajustado por arriba pero se soltaba a la altura de mi cintura, mi pelo estaba ondulado y el maquillaje se notaba un poco, pero era bastante natural.

Suspiré antes de bajar las escaleras, todas las miradas se posaron en mí.

Eli se encontraba en el pie de la escalera.

—Wow—dijo cuando me vio—. Estás preciosa.

Yo sonreí.

—Tú también estás muy lindo, te queda bien el traje—dije.

Él sonrió y me dio un pequeño y tierno beso.

—Hora de las fotos—dijo mi padre.

—Bien, que se pongan los Moskowitz—dijo mi padre.

Estaba la madre de Eli, su abuela y su abuelo, pero no su padre, supongo que debió ser duro el saber que su padre no estaría para verle, pero aún así muestra una sonrisa.

—Liesel, tenía muchas ganas de conocerte—se acercó la abuela de Eli a mí.

—Sí, Eli cuenta maravillas de ti—continuó su abuelo.

—Un gusto—dije sonriendo para después ver a Eli quien estaba a su lado.

Después de unas cuantas fotos más nos dirigimos hacia el baile.
Entramos encontrándonos a Demetri nada más entrar.

—Hey, Dem—dije.

—Hey, os veis muy bien—dijo mirándonos.

—Gracias—dije sonriendo.

—Pensé que vendrías con Yasmine—dijo Eli.

—Ella está en Australia—respondió Demetri.

Eli asintió.

—Iré a por un poco de ponche, ¿queréis?—cuestioné.

Demetri asintió a la vez que Eli negaba.

>>Bien, ahora vuelvo.

Fui hacia la mesa donde estaba el ponche encontrándome con Miguel y Sam.

—Hey chicos, os veis muy bien—dije acercándome.

—Liesel, estás muy linda—dijo Sam abrazándome.

—¿Dónde está tu galán?—preguntó Miguel.

—Está con Dem en una mesa, vine por algo de ponche—respondí.

—¿No bailareís?—preguntó.

—Sí, de eso no se va a librar—dije sonriendo.

—Bien, nos vemos entonces—dijo Sam.

Me quedé tomando el ponche, volteé topándome con alguien a quien casi le tiré el ponche encima.

—Casi—dijo.

Levanté la cabeza quedando algo sorprendida al ver quien era.

—Robby—dije al voltearme—. No sabía que vendrías.

—Bueno yo tampoco lo sabía hasta está mañana—dijo.

—Viniste con Tory, ¿no?—pregunté por curiosidad.

—Sí, siempre imaginé que vendría contigo—respondió—, pero la vida da muchas vueltas.

—Bueno, no eras el único que pensaba eso.

Mi mirada se cruzó con la suya por unos segundos, yo trataba de que una sonrisa tonta no saliera en mi cara.

—Bueno, nos vemos en casa—dijo volteándose para irse.

Yo me quedé viendo por donde se había ido, siempre me había imaginado mi baile de graduación con él, pero la realidad es que ya ni apenas cruzamos palabras aún viviendo la misma casa.

Volví a la realidad y fui con los chicos de nuevo.

—Toma Dem—dije dándole su vaso—. Y tú ven—dije tirando del brazo de Eli—. Vamos a bailar.

—Pero, Dem se quedará solo—dijo.

—No te preocupes, hay una sorpresa para él, no tardará en llegar—dije sonriendo.

Había hablado con Yasmine y vendría al baile.

—Vamos—dije tirando de él hacia donde estaba todo el mundo.

Sonaba una canción lenta, él me abrazó por la cintura mientras que yo pasaba mis brazos por sus hombros, sentía mariposas en mi estómago, como me solía pasar con Robby.
Apoyé mi cabeza en su pecho.

—Te amo—murmuré.

—Yo te amo mucho más—dijo besando mi cabeza.

Yo levanté mi cabeza para poder besarle, fue un tierno beso.
Cuando nos separamos juntamos nuestras frentes y nos quedamos así por un tiempo.

[...]

Fuimos a la casa de Stingray, dijo que continuaría la fiesta.

Yo estaba en el sofá con Eli, Demetri y Yasmine, pero estos dos últimos estaban un poco ocupados.

—Iré a por algo fuera, ¿vienes?—le pregunté, él negó con la cabeza y yo salí.

Sam estaba echándose algo en el vaso.

—Hey Sam, ¿qué tal tu baile de graduación?—pregunté poniéndome a su lado.

—No muy bien, Tory y Robby lo han arruinado un poco—dijo sin parar de echar cerveza.

—No pienses en ellos, solo ignóralos como hago yo—dije.

—Bueno—dijo suspirando.

Tomé una botella y puse su contenido en un vaso.

—Te veo luego Sam—dije para ir de nuevo con Eli.

—Volví—le dije a Eli sentándome a su lado—. ¿Dónde están Yasmine y Demetri?

—Se fueron a "investigar" la casa—dijo haciendo comillas, yo asentí—. ¿Qué traes?

—Creo que es vodka—dije, él tomó mi vaso y bebió—¡Ey!—me quejé.

Él se acercó y me besó, sabía a vodka.

—¿Vamos a casa y terminamos la fiesta?—preguntó entre el beso.

—Sí—murmuré, él se levantó del sofá.

—Vamos—dijo tomando mi mano.

—¿Ya os vais?—preguntó Stingray.

—Sí, bueno... tenemos algo que hacer—dijo Eli intentando ser "discreto"

—Oh, aquí hay habitaciones de sobra—dijo.

—No te preocupes, iremos a casa—dijo—. Nos vemos—dijo para empezar a caminar tomando mi mano.