Capítulo 9

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Su plan era levantarse temprano y en el auto a las 9 de todos modos para que puedan conducir hasta los pequeños joyeros para ver si el anillo potencial de Harry es todo lo que esperan que sea. Se las arreglan para salir a la carretera solo una hora más tarde de lo planeado, lo que en la mente de Louis es una victoria en sí misma, porque por mucho que quiera este anillo, también quiere volver a tener sexo. Y otra vez. Y otra vez.

—Hay tiempo ... joder, Lou ... para esto más tarde—dice Harry, alejando las manos de Louis cuando van a ahuecar su polla a través de sus jeans. Tiene la altura perfecta para hacerlo en su silla y decide en ese momento que no lo hace lo suficiente.—Louis, detente.

—Solo una vez más—intenta Louis, rodando hacia adelante, pero Harry lo esquiva con cuidado.

—No—dice con firmeza, luego se pone detrás de Louis y agarra su muñeca para que no pueda moverse en absoluto.—Estúpido,Solo porque ya tienes tu anillo ...

—Pero quiero chuparte la polla—Louis se queja con petulancia.—No lo hemos hecho todavía.

—Lo hemos hecho—dice Harry.—Muchas veces.

—Sin embargo, no en las últimas 24 horas, que es mi punto.

—Puedes chuparme la polla cuando lleguemos a casa, pero jodete, Louis, deja de ser una amenaza. Detente.

Louis deja caer las manos y hace pucheros todo el camino hasta el coche.

A pesar de que no pudo chuparle la polla a Harry, Louis está de tan buen humor durante todo el viaje hasta allí. Les lleva poco más de una hora, por lo que su plan es recoger el anillo primero y luego ir a por una comida rápida, solo ellos dos, para hacer un día de todo.

Normalmente, en los viajes largos en automóvil, les gusta poner la lista de reproducción de Harry y cantar en voz alta y desafinada, pero hoy la música sigue siendo baja, ya que charlan constantemente sobre todo lo relacionado con la boda, desde posibles destinos de luna de miel hasta quién estará en el fiesta de bodas.

Para cuando lleguen, decidieron que Liam será el padrino de Louis (obviamente) y el mejor amigo de la infancia de Harry, Jonny, será suyo, así que ni Niall ni Zayn se sentirán incómodos. Lucy será la niña de las flores y Ernie y Doris serán los portadores del anillo, y Louis se encontrará con Harry en el pasillo, ya que Harry realmente quiere que sus padres lo entreguen.

Encontrar a los joyeros una vez que están allí es una tarea algo difícil, con Harry tratando de empujar a Louis mientras los navega en Google Maps al mismo tiempo, pero finalmente lo encuentran, escondido en una calle lateral llena de baches que realmente le duele el culo a Louis  mientras llegan.

—Es mejor que este anillo sea el mejor anillo que jamás haya justificado ese tipo de tortura—le dice a Harry con severidad mientras Harry mantiene la puerta abierta con una mano para que Louis pueda entrar.—Mi pobre trasero.

—Lo revisaré más tarde si quieres—sonríe Harry, dando un paso a un lado alrededor de Louis para poder empujar su silla por la pequeña rampa hacia la tienda para él.—Extremadamente minucioso. Mejor que cualquier examen médico que haya tenido.

Louis lo mira fijamente.—Eres tan jodidamente raro.

—¿Puedo ayudarlos caballeros?—pregunta una voz desde algún lugar detrás de ellos, y ambos saltan.

Harry se recupera primero.—Hola—saluda, ofreciéndole al tipo una sonrisa.—Llamé ayer para un anillo de reserva. ¿El nombre es Styles?

—Ah, sí.—Él sonríe y desaparece por la puerta por la que vino, luego reaparece momentos después con una caja de anillo verde, que deja en la pantalla de vidrio frente a Harry.—Este, ¿correcto?

Hasta nuestros pies descalzos.L.S.(traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora