Caerte en una fuente a las dos de la mañana con una persona que ni conocías era la cosa más vergonzosa que le había pasado a Izuku, pero aquel encuentro desencadenaría muchas cosas
Tanto buenas como malas y todo por una boda y unos ojos azules.
Dab...
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Keigo kamaki o más conocido como Hawks.
Fue un chico bastante listo e independiente, sus padres siempre estuvieron fuera de su casa por trabajo y aunque tuviera cinco años de edad entendía perfectamente cuál era el trabajo de sus padres.
Matar a gente.
Su infancia fue bastante difícil, sus padres siempre le exigieron calificaciones perfectas aunque conseguirlas no le fue difícil, era un chico inteligente por naturaleza, lo difícil fue cuando a tan solo la edad de diez años su padre le obligó a matar a su propia madre.
Hawks todavía recordaba el rostro tranquilo de su madre mientras dormía y también recordaba él como sus manos temblaban de manera descontrolada mientras sostenía aquella pistola con ayuda de la manos de sus padre.
—Vamos keigo, dispara o serás tú el que muera en lugar de zorra que tienes por madre.
Pocos segundos después dos disparos resonaron por la habitación y cuando abrió los ojos vio dos agujeros en la cabeza de su madre y como ésta tenía la boca y los ojos abiertos mientras lo miraba, como si antes de morir hubiera querido hablar.
Cuando vio eso inmediatamente soltó la pistola y retrocedió hacia atrás chocando con el cuerpo de su padre, miró hacia un lado con los ojos llenos de lágrimas y la cara manchadas con gotas de sangre, su cuerpo tembló al ver la sonrisa tétrica de su padre .
Después de esa noche su padre lo obligó a entrenar día y noche sin descanso, haciendo que su cuerpo sangrara por las heridas causadas por los latigazos, los golpes y cortes con cuchillos.
Pasaron dos años entrenando de esa manera mientras estudiaba a la vez. Cuando un día le ordenó que se vistiera de manera elegante.
Fue entonces cuando el demonio que tenía dentro salió, conoció a Enji Todoroki un productor musical para la gente normal pero un monstruo para otros.
Entendió dos cosas en ese momento:
1 Que él era el jefe de su padre y el que tenía todo el poder de ese lugar.
2 Con la ayuda de él podría matar a su padre.
Su padre se lo presentó, tal y como esperaba, y en cuanto su padre lo dejó a solas con él para hablar con otras personas aprovechó su oportunidad, fácilmente las cosas podrían salirle mal pero aún así Keigo se arriesgó y le pidió ayuda.
Enji solo se limitó a escucharle pero nunca dijo nada, y cuando creía que todo estaba perdido vio como su padre se acercaba hacia ellos, fue unos segundos después que oyó un disparo y el grito de dolor de su padre y entonces vio como su padre se encontraba en el suelo mientras se cogía desesperadamente la pierna.
