you're just a fool, a super fool [L.S.]

parte doce

Las cosas marchaban bien, Harry termino la universidad virtualmente, alegando no querer perjudicar el trabajo de Louis. Y es que luego de tomarse un año sabático al terminar la universidad, que nadie sabe que tiene mucho de sabático si salvas a alguien todos los días, decidió que era bueno empezar una vida adulta; el trabajo, la casa, los impuestos y toda esa mierda. Eso estaba bien, a fin de cuentas, ya Niall se había graduado el año anterior y ya no tenía amigos en la universidad; y a quien engañar, Harry ama esa domesticidad de esperar a Louis con la cena servida y hablar sobre el trabajo y la universidad mientras comen para luego irse al sofá y a la cama donde sólo están ellos dos, no trabajo, no tareas, solo ellos.

「 🧣 」

— no se habla de Bruno no, no, no — cantó el menor mientras veía animadamente la película. Louis solo negó con la cabeza divertido.

— me dan pena nuestros futuros hijos. — las palabras simplemente salieron de su boca, probablemente su cerebro se descuidó y dijo lo primero que pensó, aun así, si pudiera Louis se tragaría sus palabras.

El menor dejo de cantar, de repente la parte de Camilo ya no era tan interesante. — ¿Nuestros futuros hijos? ¿Tú...? ¿Tú quieres que tengamos hijos? — cuando dijo la última pregunta se puso extremadamente tímido, lo suficiente para desviar sus miradas apenas termino de formular la pregunta, los hilos sueltos de su suéter se veían mucho más importante.

— claro que sí, Harry. ¿Por qué no querría tener una pequeña versión de la persona que amo en mis brazos? — su voz salió tan dulce que las mejillas del menor no tardaron en ponerse rojas. Louis había estado abrazando al rizado por los hombros por toda la película, así que solo dio un pequeño apretón en su hombro y lo acerco más a él.

— es solo que nunca lo hablamos, ya sabes. — sus regordetes labios apenas se habrían haciendo que la pronunciación de las palabras no fuera tan buena; pero con el paso del tiempo Louis pudo entenderlo perfectamente.

Dio una profunda respiración sabiendo que lo que iba a decir sería algo muy importante en esta situación y, tal vez, en su relación. Con su mano libre agarró su mentón levantando lo suavemente para que esos hermosos ojos verdes como esmeraldas lo mirarán.

— Harry Styles, ¿Cómo puedes decir eso? — sus rostros estaban tan cerca que no era necesario subir la voz, apenas era un murmullo y eso estaba más que bien porque era la forma que a los dos les gustaba; algo que se sentía tan íntimo, tan suyo. — yo quiero todo contigo, todo, quiero compartir anillos contigo, quiero tener hijos contigo, la casa, los impulsos, las absurdas fiestas de empresarios donde sola dan champagne extremadamente caro y extremadamente innecesario. Yo quiero una vida contigo, Harry.

— harás que me sonroje — advirtió bastante tarde pues sus mejillas estaban tan sonrojadas que se lo podría confundir con un tomate. Un hermoso tomate, pensó Louis.

— te ves hermoso sonrojado — alagó. Y tal vez iba a hacer algún chiste en que parece un tomate, o un alagó con que sus mejillas parecen como los pétalos de la Rosa más hermosa y delicada que se haya cultivado; pero no pudo. Unos regordetes y rozados labios chocaron suavemente con los suyos iniciando un dulce beso donde podía saborear la fresa del chicle que Harry mastica en las tardes, el ya leve olor de su perfume revoloteando en su nariz, la pequeña lágrima que se ha escapado de los ojos de Harry cosquillando en su mejilla. Sin abrir los ojos llevó su pulgar al recorrido que siguió la salada lágrima, secándola, y secando la que llego después de esta.

Y, cuando se separaron, Louis pensó que aún con los ojos rojos de tratar de contener el llanto, con sus rizos revueltos luego de un día al borde de los nervios por ser nuevo en la empresa de la que pronto sería dueño, con su nariz expandiéndose bruscamente en busca de aire, tal vez por el anterior beso o porque retener el llanto te quita más oxígeno del que debería, con su pecho agitándose débilmente, Harry se veía tan lindo. Harry era una obra de arte. Y una obra de arte lo quería, a él. Eso era todo lo que el corazón de Louis necesitaba para rebozar de felicidad y tal vez a él más se le escaparon unas traicioneras lágrimas

— ¿Enserio esas fiestas son tan malas?

— ni te imaginas — ambos rieron.

「 🧣 」

Y luego de mil años actualizo algo acá jsksjka.

A decir verdad esto es una basura de capítulo y más una mierda de final pero, ajá. Realmente creo que no acabe esto en el otro capítulo pq tengo algo con los números impares que no me dejan dormir en las noches así que solo por ser una psicópata escribí otro capítulo para acabar en número par.

La escuela me está absorbiendo lentamente.

Antes que nada, aun que este es el último capítulo subiré algunos extras, no se cuantos exactamente pero tengo unas dos ideas por ahí para pulir, así que esto da para un rato más.

Así que nada :p.
Gracias por leer, votar, comentar y todo eso, es lindo. Nos leemos luego.

— love, M