⁹°|[Rey]|°

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〝↢【Jose Cristo x Focus】↣〞
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El sastre del rey se movía por toda su tienda buscando con desespero las telas que utilizaría para el nuevo conjunto de su majestad, ya llevaba un par de minutos y no las encontraba.

–¿Señor, que está buscando?–

–¡Focus, que bueno que ya llegaste!–

El señor se acercó a su ayudante, quien apenas entraba a realizar su trabajo.

–No encuentro por ningún lado las telas para el traje del rey, y hoy vendrá a hacerse las medidas y posiblemente quiera verlas–

Dijo con preocupación el pobre hombre.

–No se preocupe, yo las busco, creo que el proveedor de las telas las revolvió–

Rápidamente el pequeño ayudante del sastre se puso a buscar, mientras el hombre se sentía un poco más aliviado, pues de alguna manera, el muchacho siempre encontraba las cosas que se perdían o encontraba soluciones satisfactorias en momentos de crisis cómo ese.

El sonido de unos caballos y un carruaje parar, hizo que la respiración de ambos hombres dentro de la tienda se detuviera.

El rey había llegado.

–Iré por las cosas, tú sigue buscando–

Rápidamente el hombre corrió por su cinta medidora, mientras Focus encontraba finalmente un rollo de tela de los cuatro tipos diferentes que eran.

[•••]

Qué carajos había pasado...

–Te ves precioso–

La voz del rey lo hizo despegar su vista del espejo, para voltear a ver al hombre.

–Su majestad, ¿Está completamente seguro?–

Preguntó nervioso sintiendo la vergüenza inundar su ser.

–Por supuesto que sí, no te preocupes por nada y solo déjate llevar–

Dijo mientras comenzaba a acercarse más hacia Focus, quien no sabía hacia donde mirar.

¿Qué había pasado? Bueno, es fácil.

El rey se lo había llevado al castillo para tenerlo una noche después de que, desgraciadamente para el ayudante del sastre, llamara su atención.

Maldecía en su interior al proveedor de las telas por haberlas revuelto, gracias a él estaba atrapado en el castillo después de ser prácticamente raptado de la tienda, vistiendo un conjunto de seda algo revelador con su cabello suelto, y apunto de ser tomado por el rey.

Cuando el rey quería algo, lo tenía, sea de la forma en que sea, era un hecho en el reino.

–Relájate–

Llegó el susurro a sus oídos, sabiendo que simplemente podría quedarse ahí, y obedecer.

El tacto de las manos frías del rey lo hicieron estremecerse al sentirlas sostener su cintura desnuda, siendo apegado al torso contrario, comenzando un beso hambriento sintiendo sus labios ser devorados.

Lentamente cayendo de espalda a la enorme cama, donde el colchón se hundió levemente por el peso, mirando al contrario deshacerse de sus prendas superiores.

Focus solo pudo tragar saliva e intentar recuperar su aliento al sentir su cuello ser besado, sintiendo sus mejillas hirviendo por lo que estaba pasando.

Las manos inquietas de José Cristo pasaban por debajo de la seda roja, tocando zonas erógenas que hacían estremecer el cuerpo del pelinegro.

Las prendas de ambos eran retiradas con el pasar de los minutos, el tono de las caricias subían, los besos eran más demandantes y cada vez los suspiros de gusto y leves jadeos eran más notorios en esas cuatro paredes de las gran habitación del rey.

Cambiando de posición, supo lo que ahora se venía, y a comparación de cuando iniciaron, ahora se encontraba ansioso.

El rey sabía muy bien como tocar, no quería ni imaginar que tan bueno sería lo que ahora mismo estaba por suceder.

Después abría tiempo para avergonzarse.

[•••]

Descansando sobre el pecho de José Cristo es que se despertó, frotando sus cansados ojos, notando la posición.

Con la vergüenza que en la noche se había esfumado, se apartó, intentando quitar los fuertes brazos abrazados a su cintura para poder salir de la cama y tomar un baño.

–¿A dónde vas precioso?–

La voz rasposa de recién despertado del rey lo sobresaltó, sintiendo los brazos dejando de abrazarlo, para pasar a un agarre firme en sus pobres caderas adoloridas.

–Buenos días su majestad, iba a tomar un baño–

Habló bajito, escuchando la risa ronca y adormilada de José Cristo.

–Podrás tomar un baño luego–

Con un movimiento, dejó a Focus sobre él, sonriendo divertido ante el rostro sorprendido del contrario.

–¿Su majestad?–

Preguntó avergonzado, tomando entre sus manos la sábana, que rápidamente fue arrebatada nuevamente antes de intentar cubrirse.

–No te voy a dejar ir tan rápido–

Acercó el rostro del contrario al suyo, comenzando un beso lujurioso, pues el ver el cuerpo desnudo del ayudante del sastre lo había despertado, y no del sueño solamente.

Cando el rey quería algo, lo tenía, sea de la forma en que sea, era un hecho en el reino.
































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Un José Cristo x Focus que le debía a LaOtakuSinAmigos , no me olvidé <3

Patatero-FocusBowlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora