Pov Jisoo
Una semana, una semana ha pasado de ese terrible acontecimiento.
En verdad tengo suerte de no habérmelo vuelto a encontrar, y me también me alegro no haber cruzado haber ninguna palabra con él cuando nos vimos, hubiera sido muy incomodo.
Y ahora estoy corriendo junto a Dalgom, quiera o no, con él hago ejercicio, y en buena hora traje mi medicina para el asma o si no, estaría en algún lugar muerta.
-¡Dalgom para!- exclamo mientras trato de frenarlo cogiendo fuertemente su correa, pero es casi imposible, he perdido muchas fuerzas corriendo.
-¡Miu ven acá!- grita una chica de 16 o 17 detrás de mi.
Para que entren en contexto, lo que paso fue que, Dalgom y yo salimos dar una caminata de lo más normal y tranquila pero tenía que aparecer un gato... Y caos... Y más caos.
Corro tratando de detener y cuando me doy cuenta, estamos corriendo hacia la pista, voy a cruzar la pista corriendo por Dalgom.
-¡Dalgom!- exclamo tratando de que deje de correr.
Desde hace cuatro años tengo a Dalgom, lo eduque muy bien pero cuando ve a un gato no hay poder humano que lo cambie.
Corro y llegamos a la pista, y él como toda criatura inocente sigue corriendo sin impórtale la vida de su pobre madre, cuando estamos en medio de la pista un auto frena de golpe para no atropellarme, dirijo mi mirada hacía el conductor y...
¡No puede ser!
¡No puede ser! ¡El mundo me odia! Pero, de verdad, cual era la posibilidad de que después de una semana me lo volviera a encontrar, y para variar, casi me atropella. Aunque eso no es su culpa y lo acepto. Creo que haberlo invocado, por así decirlo, fue mala idea.
Son solo cinco segundo que me pierdo en sus ojos y él igual, cuando siento la correa de Dalgom zafarse de mi mano.
¡Por un momento olvide esto!
-¡Dalgom! ¡Perro malo, vuelve acá!- grito y salgo corriendo detrás de Dalgom.
Finalmente, después de veinte largos minutos, tengo a Dalgom en mis brazos y la chica tiene a su gato.
-Lo siento mucho. - digo haciendo una reverencia -Dalgom a veces se porta mal.
-Jaja, no te preocupes, Miu tampoco es muy diferente. - me dice la pelirroja.
-¿Cuál es tu nombre?- pregunto -Podría invitarte algo uno de estos días, en compensación por lo de hoy.
-Chaeryoung, pero no es necesario en verdad.
Finalmente, acepto que no quiere nada y nos despedimos, yo vuelvo a mi apartamento y me doy con la sorpresa de que Jin esta afuera.
-Oh, hola Jin. - lo saludo sonriente.
-Hola Jisoo. - me sonríe también -Pensé que te había pasado algo, no me abrías.
-Si, si paso algo, pero fue por Dalgom, entremos te lo explicare. - ambos entramos a mi apartamento y dejo a Dalgom al suelo, él corre hasta su pequeña cama, donde tiene unos juguetes.
Luego de explicarle todo, Jin termina muriéndose de la risa.
-¡No te rías!- chillo cruzando los brazos y haciendo un puchero -Tu pobre novia podría haber muerto y tú te ríes.
-Lo siento, pero es que en verdad me da risa, Dalgom es único. - dice calmando su risa.
-Bien, ¿Podrías cuidar a Dalgom? Tengo que bañarme después de hacer ejercicio involuntariamente. - soy un poco floja en ese ámbito de hacer ejercicio, por eso no estoy taaaan molesta con Dalgom.
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Nuestro secreto
Romance-¡¿Qué te diga algo?!- no soporto más -¡Vienes después de cinco malditos años como si nada y me pides que te de otra oportunidad! ¡Eso me pasa! Para mi... ¡Para mi fue muy difícil! ¡Y un día simplemente vuelves y me pides otra oportunidad! ¡¿En seri...