Miércoles 10 de Marzo del 2021
Las yemas de sus dedos tocaban con suavidad las teclas del piano siguiendo las partituras que se sabía de memoria. Con los ojos cerrados en una especie de trance, viajó a un hermoso bosque. La oscuridad reinaba en el lugar, al estar tan juntas las copas de los arboles la luz no podía entrar e iluminar el camino. El ligero viento movía las hojas de los pequeños arbustos y de los inmensos arboles. El aroma del suelo húmedo, la corteza de un árbol recién cortado, el sonido de los animales salvajes escondidos mezclado con las finas notas musicales lo motivaban a caminar.
Sus pies se movían muy lentamente por el camino imaginario que por alguna razón no podía ver pero sabía sus limites. Una sombra se creó frente a él. No distinguía nada más que la figura alta, delicada, silenciosa. Con un sutil movimiento el desconocido alzo su brazo estirando su mano pidiéndole que lo tomará, que se acercará, que no lo dejará. Cuando más sentía acercarse más lejos se encontraba. Movía sus piernas pero no avanzaba; intentó correr más nada servía, no podía acercarse.
Poco a poco la figura comenzó a desaparecer y él aun no la alcanzaba. En cuestión de segundos quedó solo nuevamente. Todos los sonidos y la melodía se detuvo dejando un triste silencio. Un miedo se apoderó de su ser haciéndolo temblar. Miraba a todos lados buscando una salida, alguien, algún ruido que lo dirigiera. Al cerrar los ojos, en su propia imaginación, el miedo se intensifico, el terror lo consumía hasta los huesos, cada musculo se paralizó pero aún con su ultimó esfuerzo abrió los ojos de golpe, volviendo a su realidad.
–¡MAGNIFICO!
Aplausos resonaron por todo el auditorio. Desconcertado miró al frente encontrándose con los rostros conocidos de sus compañeros y maestra. Sus miradas revelaban la admiración, asombro y unos pocos la envidia.
Con sutileza se levanto de su asiento inclinándose para agradecer a sus espectadores. Alzó la cara y enderezo la espalda esperando las observaciones de su profesora.
–Tu presentación fue magnifica, sensacional....aun puedo sentir mis bellos erizados–sonrió la docente caminando hasta él–Sabía que no podía esperar menos de ti Hoseok. Es por demás decirte que tu calificación es perfecta.
–Gracias–sonrió orgulloso de sí mismo.
Trató de ignorar la incomoda sensación que aun recorría su cuerpo concentrándose en las palabras de su profesora.
–Las partituras que te di...no eran las mismas
–Si ~ yo...
–No importa. Es mucho mejor arriesgarse–anotó algo en su libreta y sonrió–estás exento del trabajo final pero si gustas puedes hacerlo y demostrarnos aun más tu talento.
–Por supuesto, he estado trabajando en esto.
Regresó a su asiento junto a su amigo que lo esperaba con una ceja enarcada y una sonrisa de labios apretados. Lo miró rápidamente y fingió buscar algo en su mochila, su compañero no le preguntaría nada pero con la sola mirada lo intimidaba.
–Estuve a punto de subir y golpearte para hacerte reaccionar–susurro. Una de sus compañeras estaba preparando su violín–Parecías muy...asustado....¿Querías llorar?
–Pensé que te quedarías callado, Hyunwoo
–Lo siento. En otra ocasión así sería pero en verdad me preocupaste
Hoseok suspiró pasándose la mano por la cara–Sentí demás la melodía ~eso es todo
–¿Seguro?
–Claro que si, Hyung ¿Qué más podía ser?
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Los días a tu lado 🎇2 won 🎇
FanfictionLee Hoseok o mejor conocido como Wonho, es un joven amable, ingenuo, de corazón puro, atractivo rostro y cuerpo de tentación. Desde que su madre lo dejo a él y a su padre, siempre están juntos. Trabaja por las tardes en el restaurante familiar de...