°*•🌷 | ѕтαʟкєʀ | 🌷•*° | ❝ [ тσʀᴅ ʟαʀѕѕσɴ ] ❞ |

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No lo podías creer, era Matt, sus ojos estaban abiertos y tenían lágrimas algo secas, de su boca salía sangre y su rostro estaba muy pálido, tenia moretones cerca de su cuello y en el rostro, te alejaste lo más que podías. Te abrazabas a ti misma tratando de calmarte pero era imposible. Lágrimas no faltaban, querías gritar del miedo, hasta que empezaste a escuchar unos golpes, estos se hacían cada vez más fuertes, gritaste pidiendo silencio y te arrodillaste mientras ponías tus manos en la cabeza.

¿____?

Se escuchó una voz chillona.

¿____? ¿Estás bien?

Era la voz de Matt, miraste a todos lados buscando de donde provenía esa voz, no lo veías en ningún lado. Todo se volvió oscuridad, pero luego viste una luz, abriste un poco los ojos y sabías que todo era un sueño.

No podías reaccionar, viste cómo Matt abría rápidamente la puerta, en su rostro se mostraba preocupación, el fue hacía ti y se sentó en tu cama.

──¿____? ¿Está todo bien? Tu rostro está muy pálido.──Preguntó mientras pasaba sus manos por tu rostro.

Sentiste que lágrimas salían de tus ojos, Matt estaba muy confundido, pero te abrazó sin importar lo que esté pasando. Tu también lo abrazaste y con fuerza.

──Tranquila, estoy aquí, siempre estaré para ti.──Dijo amablemente.

──Gracias Matt.──Dijiste para separarte del abrazo.

──De nada, para eso están los amigos.──Sonrió mientras limpiaba tus lágrimas.

──Je je... bueno, ¿para qué viniste?──Preguntaste.

──¡Cierto! Pues, los chicos y yo íbamos a ver unas películas y queríamos invitarte. Ya sabes eres nuestra amiga y también debes pasar tiempo con nosotros.──Dijo el pelirrojo alegre.

──Awww.──Mostraste una expresión de ternura.──Bien, acepto.──Te levantaste de la cama.

──¡Genial! ¡Vamos!──Empezó a dar saltitos alrededor tuyo.

Ambos fueron a la sala, ahí se encontraban todos sentados en el sillón, la película ya estaba se estaba reproduciendo, te sentaste alado de Matt y empezaron a ver la película.

Despertaste y te diste cuenta de que ya era de noche, ni eso, ya era de madrugada, todos estaban dormidos, apretados y en el mismo sofá, estabas muy incómoda, la cabeza de Matt posaba sobre tu cabeza, eso era tan tierno.

No sabes cómo pero saliste de ese sofá, la oscuridad no te dejaba ver a donde ibas, ibas caminando entre toda la oscuridad para encontrar el interruptor que prende la luz.

──Maldita sea.──Susurraste tocando la pared para guiarte.

──¿____?──Escuchaste la voz de Tord.

──¿Tord?──Respondiste.

──Que miedo, creí que era algún fantasma o algo asi.──Dijo.

──¿Dónde estás? No puedo ver nada.──Dijiste.

El agarró tu mano, su mano estaba helada, te diste la vuelta y viste su silueta, lo reconociste por la sombra de sus cuernos, tu solo diste un suspiro de alivio y él simplemente soltó una risita amable.

──¿Vas a tu habitación?──Preguntó.

──Si, pero no encuentro el interruptor para prender la luz.──Respondiste.