El dolor se hallaba bajo esos rumores.
Suspiro sintiendo cada parte de su garganta arder, la mirada perdida hacia aquellos ojos rubíes que no se dignan a siquiera notarlo.
Oh, era tonto.
Y justo ahora se había dado cuenta de aquello, era como una neblina de mentiras y promesas en la que Izuku estuvo atrapado mucho tiempo, creyendo una y otra vez al primer amor que tanto había deseado.
Sus esmeraldas viajan por el gran lugar, una de las bodas más hermosas que sin duda va a presenciar, la decoración es muy quisquillosa, una combinación de rosas blancas y rojas demostrando la pureza y pasión de la nueva unión.
Admiro nuevamente las facciones de aquel hombre, su apariencia encajaba en el tipo perfecto y deseado por muchos, sus hombros anchos escondidos bajo aquel traje, ¡Ni que decir de su altura!
Sin duda Katsuki es mucho para la palabra "perfección".
No lo puede evitar, así que llora ¿Es felicidad? No lo sabe, pero le duele, la combinación de sentimientos hace que su Omega interior se estruje. Acurruca a la bebé que carga en brazos observando sus delicadas facciones, un rostro redondo lleno de pecas, ojos esmeraldas y cabellera rubia y desordenada.
No debe llorar. Un buen Omega debe ser fuerte y valiente.
La música suena y ella entra con su largo vestido, un bordado de rosas simple que hace que su belleza como Omega resalte aún más, su cabello tiene una hermosa tiara que hace juego con su cabello marrón corto.
Ella lo logro, ella había logrado lo que tanto había soñado Izuku, quiere detener todo, quiere reclamar al alfa como suyo.
Pero... ¿Eso es muy egoísta?
Asi que lo entiende.
El perdió hace mucho, ¿Perdió? Nunca fue parte del juego, más bien ¡El fue el juguete con el que debían jugar!
Se levanta y sale de ahí, la muchacha pelirosa es la única que le a notado, lo observa irse sin tratar de detenerlo o simplemente explicarle la situación.
Y simplemente se dejó llevar, el aire contra su rostro, el olor suave y dulce de su cachorra por última vez.
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Life [Katsudeku] Omegaverse
Fanfiction"¿Era egoísta? Realmente deseaba a Kacchan a su lado, pero ya no había nada más que hacer"