❝𝗣𝗲𝗿𝗱𝗶𝗱𝗮 𝗗𝗲 𝗠𝗲𝗺𝗼𝗿𝗶𝗮❞ 【Takemichi Hanagaki】-Yandere-

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Takemichi te había sacado del lugar donde estabas, por varias razones, más que nada personales que de trabajo.

En el trabajo, Mikey estaba preocupado que llegaras a interrumpir en ellos, y las circunstancias personales de Takemichi eran simples, no quería dejarte mucho tiempo sola.

Por el hecho de que se la pasa el mayor del tiempo fuera, siempre te quedabas a solas con sus demás compañeros de trabajo.

— Ya casi llegamos...—informa Takemichi

— Bien...

Takemichi llevaba un rato conduciendo, cada vez alejándose más y más de la cuidad, tu solo te limitabas a ver por la ventana.

Pasaron unos diez minutos después de que dijo que estaban cerca, adentrándose a lo que era una gran casa en medio de un bosque.

—Llegamos—dice, alzaste la vista encontrándote con una gran casa.

Fácil podrías perderte ahí mismo.

—¿Que hacemos aquí?— preguntas bajando del auto.

—Primero entremos

Fuiste la primera en entrar al lugar, la casa tenía alrededor unas rejas de al menos dos metros y medio de alto. Takemichi abrió el portón así entrando tu primero.

Había un gran patio al frente, viendo más de cerca te percataste que tenía el diseño de una casa antigua, aquellas que son con varias ventanas en l frente, y con techos puntiagudos.

Y dos torres que no estaban puestas a la par, era bonita sin duda alguna. En pocas palabras una mansión antigua.

—Te gusta? —pregunta Takemichi al ver como quedaste viendo aquel lugar.

—Es... Lindo supongo...

—Bien~ por que será tu nuevo hogar...—te informa

Ibas a protestar pero el chico te carga estilo nupcial abriendo la casa, ya estaba amueblada, camina hasta uno de los sillones que habían en la sala y te deja en ellos.

—Espera... Por qué me entero hasta ahora de esto—le reclamas

—Lo siento por lo que voy a decir, pero tu opinión no es importante, yo solo veo por tu bienestar... —te responde con una sonrisa inocente

Eso fue lo que más te enojo es te dijera que tu opinión no era importante, te lo hubiera dicho serio o enojado, para que así pudieras reclamarle a gusto, pero que te lo dijera con una sonrisa te molestaba.

—Escúchame... me mantuviste encerrada en una habitación y no dije nada, esperando a que me dejaras ir de ahí, pero ahora resulta que no, que tengo que vivir lejos de la cuidad, lo siento pero me parece injusto

—¿Qué te parece injusto linda? Ya te lo dije ¿no? No me importa si te gusta o no, yo solo veo por tu bienestar—demanda el con un tono mas serio

—Por si se te olvido, tengo un trabajo, además de que yo deberías cuidarte a ti, que no se te olvide la situación en la que estas, o dime ¿ya recuperaste la memoria? —cuestionas cruzada de brazos

—No, no recuerdo nada de mi vida más que mi trabajo

—¿Y como se supone que recuerdas eso? —vuelves a cuestionar

—No es el momento, solo diré que no tengo varios recuerdos, y si estas preocupada por mis exámenes médicos que tengo que hacer, no te preocupes ya tengo a alguien para eso, ahora mismo solo debes quedarte aquí, tal y como yo lo diga—explico para levantarse e irse

—No soy una muñeca de porcelana que puedas mantener encerrada—dices enojada—Si un día no me llegas a encontrar aquí no te sorprendas...

Takemichi volvió hacia dónde estabas tú, sujetado de la mandíbula obligándote a verle directamente a los ojos, su mirada daba miedo.

—Ni se te ocurra escapar—habla dominante, al ver que tu rostro de miedo agacho la cabeza apoyándola en tu pecho—Lo siento... Solo no quiero que te vayas...

Murmura, le acariciaste el cabello para hacerle saber que estaba bien, poco a poco te iba manipulando.