Soulmates

Un tiempo.

No podía creerlo, me había visto con Charly y esto sería un problema, si solamente pensando en él tenía problemas ahora que vine con el más todavía. Todos lo días Juancho llegaba tarde, todos, hoy precisamente fue el día que se decidió a no llegar a las 1:00am.

-Emmm Juan...es que...-No tenía ni idea de que le iba a decir-Mira, estaba en casa de Erick que fui a comer, y él estaba allá, lo estuve ignorando toda la noche, pero cuando iba a venir el coche se me quedó sin gasolina y no habían taxis, y él se ofreció a traerme. No podía venir a pie, es mucha distancia

-¿Entonces por qué si vos viste que él estaba en esa cena no viniste para acá otra vez?-Dijo gritando, realmente me estaba asustando -Habla-Gritó

-Es que Juan, Erick quería que me quedara a cenar en familia con él y con Irma, Vane también estaba allá, y no quería darle esa decepción a Erick, él estaba realmente ilusionado -Me acerqué a él, pero él me empujó con el brazo y se levantó, unas lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos.

-¿Por qué no le dijiste a Erick que te trajera? - Estaba tan furioso que creí que en cualquier momento me iba a pegar.

-Porque ya estaba durmiendo-Me tenía harta con su interrogatorio, estaba cansada y lo menos que quería era pelea -Mira Juan, ¿sabes qué? Me voy a dar un baño para dormir, y no quiero peleas y menos el interrogatorio -Le dije fuertemente -Yo no te cuestiono a vos cuando llegás a las tantas de la madrugada.

-Es diferente, pero esta bien, vete y dormí, mañana solucionamos esto vos y yo -Estaba tan enojado, que salió y le dió un tirón a la puerta. Había salido de la casa y no sé a dónde se dirigía.

Ni te importa tampoco.

Ay ya, ahora no.

Me entré a duchar y tras casi una hora metida allí salí, me puse el pijama y me dispuse a dormir, realmente estaba cansada.

Al día siguiente.

Me despertó la alarma, tenía el suelo tan pesado y había dormido tan bien que ni siquiera la sentía. Por primera vez en muchos años tenía la cama para mí sola. Me levanté y me fui a bañar, me arregle y me baje a desayunar. Cuando llegué a la cocina me encontré a Juancho sentando en la encimera de la cocina, con las manos puestas en la cara como pensando.

-Buenos días pues-Le dije indiferente.

-Buenos días-Murmuró.

-¿Donde dormiste? -Le pregunté mientras cogía mi desayuno.

-En la habitación de Emilio.

-Ok -Sabía que era mentira, lo oí salir anoche, pero no querías problemas a esta hora de la mañana.

-Yeimy...-Me dijo, lo que hizo que me diera la vuelta a mirar -Estuve pesando en vos y yo, y creo que...-pausó.

-Habla pues, que me tenés ahí en suspenso.

-Lo mejor es que nos demos un tiempo, pues las cosas no van bien entre nosotros, sería solo un tiempo, nada definitivo, vos te quedas aquí en la casa y yo me voy a mí apartamento-Me quedé paralizada

-Pero Juan, ¿Por qué?

-Es solo un tiempo Yeimy, yo te doy a vos tiempo pues para que aclares las ideas, y darnos un espacio, sería bueno.

-Bueno pues, si vos querés, pero nada definitivo.

-No no, por supuesto que no. Bueno yo me voy a Surround que tengo que hacer unas vueltas.

-Chao pues, nos vemos allá-salió y me quedé haciendo mi desayuno. Hasta yo me sorprendo de lo bien que me había tomado esto, a lo mejor es verdad lo que dice Juan y lo mejor es tomarnos un tiempo.