CAPITULO 12 Αυτό το φόρεμα y Αζαλέα PARTE 1

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Holaaaa! Este es un mini maratón, este es la parte 1, espero y les gusteee1 comenten mucho y no se olviden de votar. 

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A.

De pronto lo tengo más cerca de mí, el aroma que su cuerpo emana llena mis fosas nasales y al tenerlo así, una escena se viene a mi mente.

¿Un recuerdo o un sueño?

No lo sé, pero pareciera que fue real.

Me recompongo rápidamente y doy dos pasos hacia atrás para poner una distancia considerable.

—Con que eres tú—es lo primero que digo, aún sigo tratando de asimilar todo lo acontecido.

—Sube al auto, no es seguro estar fuera, pueden emboscarnos en cualquier momento, llegando allá trataremos nuestros asuntos.

—Se defenderme y espero que en otra ocasión podamos concretar otra reunión—hablo segura

De la nada comienza a reírse, como si le hubiera contado un chiste.

—¿Te burlas de mí?—me hago la ofendida, pero la verdad es que estoy sorprendida ya que el jefe de la mafia más temida del mundo está frente a mí riéndose, como si fuera una persona normal y no aquel mafioso que trafica drogas, armas e incluso ha arrebatado la vida de muchos.

—No, es solo que te observe hace un rato y la verdad es que no sabías lo que estabas haciendo. ¿Segura que fuiste a la academia militar?

—Mira que mi entrenamiento militar siempre ha sido un asco, pero al menos se cómo se dispara un arma.

—Luciano tuvo suerte de no ser ejecutado por ti—no le respondo, solo lo observo ya que me parece tan irreal que siendo tan frívolo este teniendo una conversación un poco normal—Debemos regresar, no es seguro estar aquí—vuelve a su faceta de antes.

Se da la vuelta sin importarle lo que piense y me obligo a aterrizar.

No le digo nada, hago lo mismo solo que me dirijo al lado contrario a él, tomando mi propio curso.

Me urge llegar a la ciudad ya que me preocupa más lo que me pueda hacer Joseph, a comparación del mafioso a mi espalda.

También me preocupan mis amigas.

<<Yo sé que salieron bien de esta, pero quiero verlas>>

—A mí nadie me desobedece, mi palabra es ley y tampoco me dejan como estúpido—escucho a mi espalda.

No me da tiempo ni de abrir la boca cuándo siento que soy cargada como un costal de papas.

Comienza a caminar hacia el auto conmigo en su hombro, pero no sé porque insiste tanto en llevarme.

En un hábil movimiento, me balanceo con todas las fuerzas, me sostengo muy bien de sus cintura y me impulso, haciendo que los dos caigamos en la tierra, me arrastro lejos de él tomando una buena distancia.

—Todos me dicen que en el entrenamiento soy un asco, pero he aprendido bien unos trucos—me levanto lo más rápido que puedo.

—Mocosa de mierda—se levanta dispuesto a llevarme a rastras, cuándo una tercera persona sale del auto, no se acerca solo nos observa desde la distancia y el hombre frente a mi detiene sus movimientos.

—Si quieres darle un golpe a la OETP, no te serviré de mucho—intento explicarle—Si quieres información no te la daré, solo soy la nueva fiscal, no soy de las familias poderosas, ni mucho menos multimillonaria, si me desapareces se buscarán quien ocupe mi lugar y harán como si nada paso, así que no sé qué es lo que quieres de mí.

AMORES FINGIDOS: PASIONES, MENTIRAS Y CENIZAS (+21) EN PAUSA (Momentáneamente)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora