El muy esperado día para los chicos de la clase 1-A por fin había llegado, los estudiantes podrían salir el fin de semana. Bakugou planeaba ir a ver a su madre, o sabía que esa bruja lo terminaría regañando si no la iba a visitar
El alfa salió de su habitación y dió un gran bostezo, estuvo pensando en cosas innecesarias toda la noche y por eso no había dormido las horas que acostumbraba
- estúpido nerd de mierda – murmuro abriendo la puerta de su habitación, encontrándose con toda la clase en la sala. Chasqueo la lengua, no tenía ganas de ver las caras de todos esos extras, pero al menos Deku no se encontraba ahí, pensó que ya se habría marchado a ver a su madre, dió un pequeño suspiro cuando no lo encontró ahí, pues realmente no quería verlo, estuvo la mayor parte de la noche pensando en su estúpida cara
Cuando el cenizo abrió la puerta de los baños, Bakugou notó que el mitad-mitad y el cuatro ojos estaban dentro, pero también el peliverde, el alfa murmuro algo entre dientes y se aproximó al trío para comenzar a asearse. Izuku notó la presencia del alfa e inconscientemente le dirigió una diminuta sonrisa, Katsuki se congelo unos segundos observando esa boba sonrisa hasta que reaccionó, y apretó la mandíbula mientras gruñía
El rubio miro al peliverde de manera amenazante, él era la causa de que su mente estuviera hecha un lío
- ¡EEP! – Izuku se sobresaltó por la inesperada reacción de Katsuki
El rubio dió media vuelta y prefirió marcharse, Izuku bajo la cabeza decepcionado, Kacchan seguía igual de extraño
- ¿iras a ver a tu madre Midoriya? – pregunto Iida
- Si.... Mi madre se preocupa mucho, así que tengo ir a verla cada vez que se me dé la oportunidad
- Deberías apresurarte para estar más tiempo con ella... la U.A tiene reglas estrictas, tienes que regresar antes de la hora acordada – dijo lida haciendo movimientos robóticos con su mano
- Lose, será mejor que me dé prisa – Izuku se despidió de sus compañeros y le avisó a los profesores que saldría
El peliverde llegó a su habitación, antes de partir reviso un pequeño cajón donde guardaba los supresores, dudo unos momentos y decidió tomar el frasco de inhibidores que estaba aun lado, había dejado de usar lo supresores hace un buen tiempo, pensó que sería mejor usar los inhibidores en su lugar, a pesar de lo peligroso que podría llegar a ser, ya que solo mantenían bajo represión su feromonas, pero realmente no quería tomarlos ese día, cuando tomaba los inhibidores siempre tenía que soportar los efectos secundarios
Deku apretó los nudillos y decidió que hoy no los usaria, el pecoso cerró la puerta de su habitación, de todas maneras, pasaría a casa de su madre, con ella no tendría que ocultar nada. Recordó lo que sucedió en el metro la otra vez, así que decidió que tampoco tomaría el metro, estaba cansado de encontrarse con pervertidos cada vez que subía a uno
Tomo camino hacia la casa de su madre, comenzó a dirigirse tranquilamente por el camino donde él y Kacchan solían atravesar cuando eran niños, recordando aquella época de su infancia, cuando ambos solían jugar juntos, cuando Kacchan y el aún eran amigos
- kacchan, eso fue genial!!! – dijo un pequeño peliverde con un brillo en los ojos mientras seguía al rubio
- claro que lo fue, ¡¿con quien crees que hablas deku?! – dijo este sonrojándose ligeramente mientras caminaba con la cabeza en alto, algo en los pequeños elogios del peliverde lo hacían sentir superior. De pronto unas pequeñas gotas comenzaron a caer mojando la ropa de ambos
- eh?... ¡Kacchan está lloviendo!
- ¡rápido vamos a mi casa! – el rubio tomo la mano de Deku para comenzar a correr
- apresúrate Deku
- ¡espérame Kacchan! – no puedo correr tan rápido
El peliverde bajo la cabeza al recordar aquello
- ¿en qué momento todo cambio? – susurro deprimido el peliverde, desde ese día, Kacchan obtuvo su quirck se fue alejando cada vez más de Izuku
Deku se detuvo abruptamente en medio del callejón, sintió una punzada en su pecho, y un escalofrió recorrer su cuerpo, repentinamente comenzó a sentirse caliente, el rostro de Izuku se sonrojo completamente
- Haa....haaa.... esto...esto no puede ser verdad – El peliverde trato de seguir caminando, se sentía cansado y mareado, Izuku se recargo sobre un árbol con la respiracion agitada
- ¿q-que es esto? – dijo jadeando mientras se llevaba una de sus manos a su rostro cubriendo su nariz y boca, sentía varios aromas mezclarse en el aire, eran demasiados como para soportarlos
- no....Esto no es real – sus ojos temblaron por el miedo - E-estoy en celo – alcanzo a pronunciar con algo de esfuerzo, nunca había presenciado su primer celo, así que no sabía que era aquella sensación, Izuku comenzó a caminar apresurado... debía de llegar a casa de su madre lo antes posible y tomar sus supresores - ¡soy tan estúpido, como pude dejar de usar los supresores! – grito alarmado Deku
Por lo menos no había nadie en ese callejón
- Te-tengo que llegar rápido – las piernas del pecoso temblaban, Izuku levanto el rostro, y en ese momento se paralizo, su mente dejo quedó en blanco, quería correr, pero no podía, así que solo comenzó a temblar aterrado
- ¿Deku?
- Ka-katsuki.... ¿Por qué estás aquí? – hablo Izuku cubriendo su rostro completamente sonrojado, tratando de que su voz saliera con normalidad, pero a pesar de su esfuerzo se escuchaba agitado
- ¿Qué?, ¡¿esa es mi línea imbécil?! – rugió Bakugou acercándose de manera peligrosa al peliverde – tu eres el que está metido en mi camino, yo vine a ver a mi madre – fue entonces que Deku recordó que sus caminos terminaron uniéndose porque el alfa vivía en la misma dirección que Izuku – además primero tengo que ir a tu casa a recoger algo que mi madre me encargo...¡pero no creas que lo hago porque quiero! ¡me obliga.... – Katsuki se detuvo abruptamente sintiendo el mismo olor dulce de la otra noche
- ¿Qué es eso? – dijo el rubio percibiendo el aroma en el aire, Izuku dio un jadeo aterrado
- yo no huelo nada...
- eso lose... eres un patético beta
- yo...¡yo me tengo que ir! – dijo Izuku adelantándose cuando escucho la voz del alfa haciéndolo estremecer
- los dos vamos en la misma dirección, ¡no creas que puedes ir delante de mí! – dijo Bakugou emprendiendo camino, mientras dejaba atrás al peliverde
Izuku solo siguió caminando detrás de Bakugou, estaba algo lejos de él, podría ser peligroso que sintiera sus feromonas en este momento, sus piernas cada vez se sentían más pesadas y trataba con todas sus fuerzas de contener sus feromonas, pero para un omega en celo eso era prácticamente imposible, y Bakugou no se molestaba en ocultar las suyas, él iba a todas partes presumiendo su aroma a alfa, aquello no ayudaba para nada, Deku intentaba seguir caminando, pero el más mínimo roce de su piel con sus ropas lo hacía estremecerse
- bien ya llegamos, ahora abre la puerta nerd – Deku se apresuró a abrir la puerta, realmente necesitaba apresurarse así que accidentalmente empujo a Bakugou
- ¡oye que te pasa maldito bastardo!
- ¡lo-lo siento! - el peliverde se dirigio a toda velocidad a su habitacion
- Oh... Katsuki – Bakugou escucho la voz de una mujer – que gusto que vinieras, hace tiempo que no te veía
- Señora Inko – dijo haciendo una pequeña reverencia
- ¿tu madre te mando? – el alfa hizo un pequeño asentimiento con la cabeza – puedes esperar en la habitación de Izuku... no tardo
Bakugou gruño para sus adentros, subió las escaleras y doblo el pasillo hacia la derecha, de niño había venido varias veces a la casa de Deku, así que sabía el camino de memoria, Bakugou llego hasta la habitación del peliverde y entro sin previo aviso, y en cuanto lo hizo, aquel aroma comenzaba a intensificarse cada vez más, Bakugou tuvo que llevarse una de sus manos a la nariz, el olor era realmente fuerte
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El aroma de una presa
Romance⚠️Contenido +18 Deku no tenía ninguna singularidad, y todo empeoró cuando se enteró que era un Omega y Katsuki un alfa dominante Aquella noticia destrozó sus esperanzas "ser un héroe, a pesar de no tener ninguna singularidad". Pero sus problemas no...