Capitulo 13

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Anteriormente...

- ¿estas en celo ahora mismo? - el Amajiki se sobresalto

- ¿c-como sabes eso?

- te mordí ¿recuerdas?, ahora solo soy el único afectado por tus feromonas - el alfa sonrió reconfortantemente - ¿porque intentabas ocultarlo?

- no fue mi intención - Tamaki bajó la cabeza - no quería molestarte

- Tamaki, somos alfa y omega... no es molestia, puedes pedirme ayuda cundo la necesites - el azabache finalmente levanto el rostro, Mirio trago en seco, el rostro entero del Amajiki estaba sonrojado y con pequeñas gotas de sudor deslizandose por su cuello

Mirio tomó a Tamaki de la muñeca repentinamente y comenzó a jalarlo hacia otro lugar, el Amajiki se sorprendio por la repentina acción del rubio, y torpemente intento seguirle el paso

- ¿a donde me llevas...? - Mirio no dijo nada, solo siguió caminando, dejando con la duda al azabache, hasta que finalmente Mirio se detuvo en la habitación del omega

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- haa...ah...espera - el azabache cerró los ojos con fuerza mientras el rubio estimulaba sus pezones, una pequeña gota de sudor se deslizó por su rostro hasta su cuello, Mirio se sonrojo fuertemente, y en un rápido movimiento atrapo los labios de Tamaki en un calido beso

- espera un minuto...Mirio - el azabache se sentó sobre la cama y se cubrió tímidamente el pecho con su prenda con algunos botones abiertos, solo tenía puesta aquella delgada camiseta blanca, ya que anteriormente Mirio lo había despojado de su ropa interior,  Tamaki desvió la mirada, no podía seguir soportando que el alfa jugara a su antojo con su pecho - es demasiado vergonzoso

Mirio sabía que Tamaki era demasiado tímido, por eso trataba de ser paciente con el e ir lento. El rubio dirigió su mirada al cuello del Amajiki, su piel palida un conservaba aquella marca de mordida

Lentamente Mirio volvió a acercarse al omega, y volvió a unir sus labios en un tierno beso, el alfa comenzó a recostar al azabache sobre la cama para posarse sobre de el, sus manos nuevamente viajaron al pecho del Amajiki. La delgada camiseta de Tamaki se impregnó en su cuerpo del por humedad de su cuerpo. El rubio introdujo su lengua explorando la cavidad del Omega, haciendo más candente el beso, y atrapando algunos pequeños gemidos del omega dentro de su boca.

- ¿estas bien Tamaki?

- q-quitalo todo... es mas embarazoso de esta manera después de todo

El rubio sonrió satisfecho, y le quitó aquella estorbosa prenda a Tamaki apreciando mejor su cuerpo, Mirio dirigió sus manos a la entrepierna del omega notando que Tamaki ya estaba duro así que el alfa se posicionó entre las piernas de Tamaki y se quitó la polera de un rápido movimiento dejando ver su trabajado cuerpo, ante esto Tamaki se sonrojo fuertemente. Pronto leves suspiros salían de la boca del alfa, la habitación estaba inundada de feromonas que solo el podía percivir, y el ambiente comenzaba a volverse mas caliente cada vez.

Mirio comenzó a desvestirse y como pudo liberó su erección, estaba comenzando a perder el control, pero sabía que si se apresuraba asustaría a Tamaki y primero debía prepararlo antes de entrar en el. Pero Tamaki se adelantó al notar la gran erección del alfa, estaba excitado al igual que el y su alfa trataba de resistir para no lastimarlo, ante esto Tamaki se sintió un poco culpable

- M-Mirio - gimió Tamaki poniendo su mano sobre el pecho del alfa para detener lo que estaba por hacer - y-yo lo hare - el omega uso su quirck y transformo su mano en un tentáculo de pulpo, el rubio abrió sus ojos con sorpresa, y sintió que su erección comenzaba a doler.

Tamaki cuidadosamente introdujo un tentáculo en su entrada húmeda, otorgando una maravillosa escena para el alfa. El tentáculo se deslizó dentro de su cavidad hundiéndose cada vez más

- angh - Tamaki dejó salir un gran gemido, la sensación de los tentaculos introduciendose dentro de el era realmente extraña y a la vez placentera. El omega abrió sus piernas para sentir más a profundidad aquella se sensación, un segundo tentáculo apareció y comenzó moverlos con más rapidez, rozando su paredes, aquello provocó un ligero escalofrío en el y su miembro comenzó dejar salir un líquido blanco y espeso

- Tamaki espera - Mirio se mordió el labio, ver al omega tocarse a el mismo era una escena que ningún alfa podría resistir, tenía el rostro sonrojado, y unas cuantas lágrimas desbordando de sus ojos. El Amajiki se sentó sobre el regazo del alfa estimulando su entrada el mismo, sintiendo el pegajoso tentáculo humedecerse por sus fluidos provocando sonidos embarazosos

- esto es muy vergonzoso...siento que voy a morir - el omega escondió su rostro en el hombro del rubio - pensé que sería mas rápido si yo lo hacia- Mirio se separo de Tamaki para verlo a la cara

- Tamaki tu eres el omega en celo...quiero hacerte sentir bien - Tamaki desvío la mirada y asintió tímidamente, uso nuevamente su quirck para desaparecer sus tentaculos, la entrada del omega y estaba lista, así que Mirio lentamente introdujo su miembro ocasionando unos gemidos de parte de Tamaki

- mn...Ahhh - Tamaki pasó sus brazos alrededor del cuello de Mirio y cerro los ojos con fuerza sintiendo un enorme placer. Mirio comenzó con estocadas lentas y poco a poco fue aumentando el ritmo al igual que los gemidos que inútilmente Tamaki trataba de retener. El rubio llevó una de sus manos a los rosados pezones del Amajiki, acariciándolos en círculos

Mirio podía sentir el aliento cálido de Tamaki chocar contra su cuello, dejó salir un jadeo y dió una última estocada saliendo del interior del omega para correrse afuera, Tamaki también se vino se vino manchando su pecho con su esencia

Mirio se separo de Tamaki para recuperar el aliento y limpiar el desastre que habian echo

- ¿te lastime? - pregunto acercandose al omega, que tenía el rostro completamente rojo, realmente estaba avergonzado así que solo nego, Mirio suspiro aliviado y dirigió su mirada a las manos pálidas de Tamaki - Tamaki, ya habías usado tus tentáculos para hacerlo por tu cuen...

- no termines esa frase - dijo Tamaki desviando la mirada, Mirio solo pudo pensar que aquella acción era realmente adorable, pero con aquella idea sintió algo reaccionar de nuevo

Tamaki se dejó caer sobre la cama, mientras trataba de regularizar su respiración, en ese momento Mirio pudo tener una vista completa del cuerpo del omega y trago en seco. El alfa lentamente se acerco al omega para darle un tierno beso

- Mirio - gimió el omega, el alfa introdujo su lengua volviendo para sentir más a profundidad aquel beso, el rubio se separo del omega que aun tenía aquel tierno sonrojo adornando su rostro

- Tamaki...hagamoslo de nuevo

- ¡¿eh?!

El aroma de una presaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora