Capitulos 417 y 418

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Realmente no sabia si seria una semana entera, pero estoy segura que Heinley evitará el contacto físico conmigo durante varias días.

A diferencia de Heinley, Navier no le tenía miedo al fantasma del Duque Zemensia. Pero últimamente estaba teniendo pesadillas.

La última vez que tuvo pesadillas fue en su divorcio, pero las pesadillas regresaron.

Me gustaría tener a Heinley a mi lado en estos momentos, pero Heinley me sigue evitando...

"Su Majestad, ¿escuchó? Dicen que Rashta está muerta".

"Rashta..."

"Sí, se suicidó después de ser depuesta".

Mientras tanto, cuando me enteré de la muerte de Rashta, mi estado de ánimo se volvió aún.

"Que maravillosa noticia". Contestó la Vizcondeza Jubel y agrego.

"Estoy agradecida de no tener que inclinarme ante ella incluso si regreso al Imperio del Este."

Laura asintió y luego preguntó con seriedad.

"¿Entonces que va a pasar con el Emperador Sovieshu?¿Se volverá a Casar?"

Cuando un Emperador se queda sin su pareja, la presión es horrible para volverse a casar. Cada día es Agotador y difícil.

Sovieshu siempre ha querido tener hijos... ¿Se casará de Nuevo?

Tres horas después de que hablamos sobre Rashta, me acosté en la cama y junté mis manos después de una pequeña cena.

Esto es incomodo... Cuando estaba en el Imperio Del Este, siempre me sumergia en largas horas de trabajo para tratar las cosas de la manera más objetiva posible y pensaba que mis asuntos personales solo eran cuestión de tiempo. Pero ahora que estoy embarazada y algo herida, me siento muy cansada... Normalmente me consuelo con trabajo nocturno... Heinley, me gustaría que estuvieras a mi lado...

"¿Reina?"

Cuando estaba durmiendo sentí una gran mano acariciando mi cabello.

Cuando abrí los ojos vi a Heinley y cuando traté de llamarlo me sorprendió que extendiera la mano y me tocara después de mucho tiempo

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Cuando abrí los ojos vi a Heinley y cuando traté de llamarlo me sorprendió que extendiera la mano y me tocara después de mucho tiempo.

¿No había dicho que no quería tocarme porque le daba miedo?

Tan pronto como lo pensé, el sueño desapareció y una voz fría salió de mí.

"¿No dijiste que no querías tocarme?"

Heinley sonrió y lo negó.

"No dije que no lo quería, Reina".

"¿Entonces porque me tocas ahora?"

"Porque creo que la reina lo está pasando mal".

"No fue nada difícil".

"Pero fue difícil para mí".

TelaFlan, La Grandiosa Emperatriz que un Bolasecas no supo valorar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora