"Lo siento, pero eso no es posible".
La respuesta estaba predeterminada. De todos modos, ¿esperabas que aceptara tus términos?...
El cuarto comandante se sorprendió cuando escuchó mi respuesta.
"¿Enserio?"
"No es posible".
"¿No es suficiente con decir el nombre del Gran Duque Lilitang?" Me pregunto de nuevo con un tono de sospecha en sus palabras.
Supongo que no tomó en consideración mi negativa.
"No estoy tratando de hacer nada malo tomando prestada la Quinta División, Su Majestad. Todos son mis colegas, incluso los otros caballeros. Solo quiero que me ayuden porque tengo pocas manos".
"Lo siento pero no puedo aceptarlo".
El Cuarto Comandante me sonrió de forma astuta.
¿El Vizconde Langdel le contó algo sobre mi?
Afortunadamente no sabia nada al respecto, asi que no me van a descubrir si llego a mentir.
"No".
El Cuarto Comandante inclinó la cabeza.
"Pero..."
Me reí detrás de él, luciendo lo más relajada posible.
"Antes de amenazar, es mejor que primero sepa si la persona que está frente a usted puede ser chantajeada o apaciguada".
Ángel se paró enfrente del pomo de la puerta, giró la cabeza y me miró.
"¿Sabes que?"
"¿Disculparme?"
"Me decepcionaría si dijeras que me los vas a prestar".
"¿Eh?"
¿Me estaba probando?¿Te estabas preguntando si vendería a mis camaradas en las condiciones que yo quisiera?
En un momento de duda, el cuarto comandante agregó con una sonrisa.
"Pero no te diré la ubicación del Gran Duque Lilitang porque esa era nuestra condición. Algo sucedió por el amanecer..."
"¿Qué quieres decir con que pasó algo?"
"No sé los detalles, pero no se veía bien y supongo que no fue algo fácil".
***
Un asistente estaba preocupado pues tenía una noticia que darme.
"El Gran Duque Lilitang fue encontrado en un estado caótico en la embajada del Imperio del Este por la noche, Su Alteza". Dijo el Asistente y luego agrego.
"La embajada llamó inmediatamente al Emperador Sovieshu".
"¿Entonces el Emperador Sovieshu ahora esta con el Gran Duque?"
"No, él todavía está en la embajada, pero el Emperador Sovieshu parece estar tratando de comunicarse con Su Majestad Heinley".
El asistente hizo una reverencia y salió de la habitación.
Mis damas de compañia intercambiaron miradas entre ellas.
El asistente había acabado de darme una noticia de forma ansioso y dándome a entender que puede ser un desastre publico. Así que no puedo decir que las cosas van a ir bien... No, definitivamente no van a salir bien...
Después de comer, me dirigí a la oficina de Heinley, pero Heinley no estaba en la oficina. Solo se encontraba McKenna.
McKenna me dijo que Heinley estaba en la construcción del nido.
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TelaFlan, La Grandiosa Emperatriz que un Bolasecas no supo valorar
RomancePara las personas que se quedaron en el capítulo 381 y ya no encontraron más traducciones en español; Les Traigo una Traducción en Español hecha por mi. Importante: Esta Novela no me pertenece, solo Traduje los demás capítulos En español. Les recomi...