|CAPÍTULO 18|

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—Cuidense mucho y por favor, avísenme si pasa algo—habla mamá, abrazandonos a Sam y a mi.

Ya nos vamos al aeropuerto para irnos a Canadá.

Samuel no puede acompañarnos al igual que Nelson, en el colegio mamá habló con el rector y me dieron permiso de ir, así que este será un súper viaje de chicas.

Iremos a escalar una cascada congelada, será un sueño que hayamos cumplido juntas.

Llegamos ¡por fin!

Fueron las 47hs más largas, dormimos lo suficiente, nos hospedamos en un hotel, todo tiene nieve, iremos a escalar la cascada con un experto en eso.

—¿Falta mucho?—pregunta Sam con cansancio, llevamos caminando 30 minutos para poder llegar a esa cascada.

—Falta poco—dice el señor que nos guía, al rato dice lo que tanto esperábamos—De acuerdo, llegamos.

Miramos hacía arriba dónde se encuentra esa enorme cascada.

Subimos una por una, primero sube Sam con cuerdas a su alrededor en caso de emergencias, cuando llega a la cima, grita a todo pulmón.

—¡JUMANJI!

Parece un ángel allí arriba.

Junto mis manos alrededor de mi boca y grité con todas mis fuerzas.

—¡Mi pequeño ángel de nieve!

Ella baja su mirada, alza sus manos al aire y sonríe.

Doy carcajadas como loca, cuando fue mi turno, sentí que moría estando arriba, pensé que no lo iba a lograr, tardé mucho pero lo logré. Estando arriba disfruté de esa vista increíble.

Pasamos al siguiente sueño de la lista.

Llegamos a nuestro destino, fueron 5091 km para llegar a la ciudad de Belice. Todo pagado por los padres de Sam, ya saben, por nuestro cumpleaños.

—¡Vamos, Antho!

—No puedo, no lo haré—grité para que me pudiera escuchar.

Estamos haciendo paracaidismo ¿qué si estamos locas? pues si.

—Pero es nuestro sueño.

—No, ese es tu sueño.

Era la verdad, le tengo pánico a las alturas pero Sam lo adora.

—Ya deben saltar—dice el hombre a nuestro lado, es un paracaidista profesional.

Recuerdo que nos dijo cómo hacerlo y en qué momento. "Aterrizarán en el agua, subirán a un bote en dónde les pondrán un equipo de buceo y se sumergirán en el arrecife, que es reconocido como Patrimonio de la Humanidad" ah, y que estamos a 3.300 metros sobre Blue Hole.

Una locura aterradora total.

—Te amo Sam pero de ninguna puta forma haré eso—retrocedo y me aferro al asiento.

Esto es una de las cosas que haremos una vez en nuestras vidas y yo quiero hacerlo contigo—me extiende su mano, lo pienso pero terminé por aceptar.

Hay dos hombres, cada una iremos con ellos.

—Sam, nunca olvides que te amo y si muero, te jalaré los pies.

—Si, si, también te amo.

Y saltamos, me aferré de las correas que tengo a mi alrededor, aprieto mis ojos fuerte y grito como loca.

Siento el viento por todo mi ser, abro mis ojos y veo esa hermosa vista, a un lado veo a Sam gritando, extiendo mis brazos a cada lado y ¡mierda! siento que soy un libre pájaro. Esto es maravilloso.

¿Amarte u Odiarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora