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"Querido diario (único confidente hasta ahora)
No se que hacer o que no hacer, tengo miedo de que Papá llegué a darse cuenta de todo ésto ¿qué haré si se entera?
Empiezo a creer que fue muy estúpido tener esa clase de riesgos con Axl ¡en qué estaba pensando!?
No quiero que nadie sepa de esto, fue un gran error, fuí estúpida al pensar en que Axl cambiaría por mi.
Una y mil veces me ha dejado saber que ante sus ojos aún soy esa ingenua niña de once años, que aún me mira como una amiga y no como algo más, y es bastante lógico porque Axl es un chico apuesto, tiene a tantas chicas detrás de él, derritiéndose por él, esperando su turno para salir con él."

...

Me encontraba limpiando la pieza de Axl, mi abuela me lo había pedido ya que de la habitación de Axl salía un olor nada agradable, supongo que eso se debía a que el pelirrojo nunca se encargaba de mantener limpio el lugar donde dormía.
Había una enorme pila de ropa sucia, odiaba levantar la ropa sucia de otros, cuando por fin levanté la ropa me dí cuenta que debajo de esa enorme pila se encontraba una bolsa llena de lo que seguramente sería droga, hace poco Axl había hecho mención a ello, dijo "conseguí quién me venda droga a un buen precio"

Cerré la puerta de la habitación de Axl, abrí aquella a bolsa, debo admitir que consumí una buena cantidad del contenido de la bolsa.

Ni siquiera sabía porque Axl consumía eso, pero debo admitir que te hacía tener viajes únicos, se sentía también inhalar, sentirla entrar por tus fosas.

- ¿Qué estás haciendo!? - Me preguntó Axl histérico, mientras me observaba.
- ¡Nada! ¡No es lo que crees! - Dije mientras limpiaba los residuos de mi nariz.
- ¡Oh, claro! Crees que soy tonto como para no saber que era lo que hacías -
- Axl, yo solo... -
- Tranquila, no se lo diré a nadie, ni tú abuela, ni tú Padre sabrán de ésto -

...

Creo que para este punto ambos estábamos lo suficientemente inconcientes como para tener recuerdo de este momento, o de está charla, aunque ella era quién se encontraba más inconciente, era la segunda vez que tenía contacto con las drogas, no tenía la menor idea de como controlarlas.

- Axl -
- ¿Qué pasa? -
- Estoy cansada de esto -
- ¿De que hablas? -
- De fingir que no te amo, de fingir que estoy molesta contigo -
Era una declaración bastante sincera, quizás mañana no la recordaría.
- Tranquila cielo, me cuesta admitir muchas cosas ¿sabes? - Murmuré - No eres la única que tiene esos pensamientos, eres bastante linda, pero, no lo sé, todo es tan confuso... -
- Axl, lo siento si te he hecho sentir mal alguna vez -
- Demasiadas veces lo has hecho, ni siquiera puedo recordarlas todas, pero está bien, supongo que las merezco -
- Nunca te vayas de mi ¿si? -
- Me quedaré contigo hasta donde pueda -
- Aún me llevarás contigo a Los Ángeles?? -
- Claro, imagina, tú, yo, una buena canción de Led Zeppelin de fondo... quizás compartamos besos y eso -
Se dejó caer sobre el piso, parecía algo mareada.
- Te amo Axl - Apenas podía sostener la oración.
- ¿Estás bien? -
Negó con su cabeza y callo completamente inconciente.
- ¡Niña! ¡Niña! ¡Keys! ¡Niña! ¡Despierta por favor! - La sacudía intentando hacer que despertará.

...

Abrí mis ojos de impacto, mi corazón estaba acelerado, mi respiración estaba algo agitada, mi cuerpo entero temblaba, sentía mi cuerpo helado.

- ¡Niña! - Dijo Axl extendiendo sus brazos y dándome un fuerte abrazo.
- ¿Qué sucedió? - Dije - Yo, no recuerdo... - Sentí una fuerte punzada en mi cabeza.
- Anoche caíste inconciente -
- ¿Por qué? Nadie cae inconciente solo porque si -
- Es entendible, verás, es la segunda vez que tienes contacto con ésto, y es entendible ya que aún no tienes control de ello ¿entiendes? -
- ¿No? -

To Be Continued...

𝙎𝙬𝙚𝙚𝙩𝙞𝙚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora