Capitulo 31

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Mew regreso a casa solo para encontrar que la sala de la misma estaba siendo invadida de libros, allí estaba la anciana Anthika, Amaia, Gulf, la doctora Ana y una mujer que no conocía, concentrados en la lectura.

—Mmmm, ¿A qué se debe todo esto?— pregunto algo confundido.

Siendo la anciana la primera en responder mientras que Gulf corría a darle un abrazo y un beso al alfa —Como te dije cuando viniste a qué te preparará el rastreador, tu padre está estable, logramos quitarle el dolor nuevamente pero ¿Por cuanto tiempo?, Tenemos que tratar de quitarle el hechizo y por eso está Julieta con nosotros.

—¿Y ella es?

—Mucho gusto, como ya dijo Anthika mi nombre es Julieta y soy una de las curanderas de las manadas del norte, mi familia al igual que la Traipipattanapong le rendimos culto a la luna, no al mismo nivel que ellas pero lo hacemos.

—Ella vino aquí a petición de mi abuela, necesitamos una segunda opinión sobre lo que está pasando, para nosotras esto es algo nuevo, las cosas siempre habían sido pacíficas para este lado del territorio, no nos habíamos visto en la necesidad de usar la sabiduría ancestral desde hace mucho tiempo— intervino Ana ampliando la información.

—Entiendo, ¿Que han encontrado hasta ahora?— el castaño era uno de los principales interesados de que su padre se recuperará, quería que siguiera al frente de la manada, a él todavía le quedaba mucho tiempo para ser líder.

—Para tu desgracia cuñadito nada, aún no hemos encontrado algo que nos de luces para saber a lo que nos estamos enfrentado... así que vete acostumbrando, serás el alfa por un tiempo más.

Amaia estaba en lo cierto aunque encontraran el antídoto esa misma noche, no garantizaban que tuviera una recuperación rápida y volviera a estar a su cien por ciento inmediatamente; al cabo de un rato regreso Earth con el pequeño Aqmar, quien al ver a sus padres estiró sus brazos queriendo estar con ellos.

Con una sonrisa depósito al niño en el regazo de Gulf quien inmediatamente comenzó a llenarlo de besos y a preguntarle si se había divertido con el tío Earth, Aqmar solo pudo reír ante las palabras de su padre, el adolescente se unió a las demás mujeres en su búsqueda, quería sentirse útil y ¿porque no? mantener su mente ocupada tratando de no recordar lo que había pasado con Kao.

En su mente sabía que lo sucedido había sido lo mejor, pero como le decía a su corazón que las cosas no podían ser, ni siquiera era su destinado, a ese aún no lo conocía, solo esperaba poder llegar a disfrutar de ese privilegio temprano en su vida y no terminar como algunos otros miembros de la manada que jamás lo encontraron.

Tenían más de tres horas solo leyendo libros incluso Mew se había unido a la búsqueda, sus padres se mantenían en la habitación, el nuevo brebaje que les había dado la anciana Anthika los había puesto a dormir, tenían que mantenerse en reposo el m...

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Tenían más de tres horas solo leyendo libros incluso Mew se había unido a la búsqueda, sus padres se mantenían en la habitación, el nuevo brebaje que les había dado la anciana Anthika los había puesto a dormir, tenían que mantenerse en reposo el mayor tiempo posible, bueno en realidad el que necesitaba estar en ese estado era Max; pero Tul siendo su compañero podía compartir a través de su enlace todo lo que esté sentía y eso le estaba haciendo daño también, la angustia era demasiada para el omega que no encontraba que hacer para aliviar a su pareja, por esa razón la mujer había tomado la decisión de ponerlo a dormir, así no pensaba en nada y estaba tranquilo.

El Destino De La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora