Capitulo 21

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Corrieron por el bosque acompañados de los otros cambia formas, eran libres, sus lobos eran felices, se sentían uno con la naturaleza, sus instintos animales estaban haciendo todo el trabajo, pero en su subconsciente aún estaba el hecho de que querían estar a solas con su pareja, por ello ese grado de humanidad que aún les quedaba hizo que se desviaran del camino que estaban llevando y llegaran a la cabaña que ahora iba a ser su nuevo hogar; Por ello, Max y tul se hicieron cargo de seguir liderando la carrera de esa noche.

Los jóvenes entraron en su forma de lobo a su nueva casa, la puerta estaba abierta, pues habían previsto que algo así podía pasar, una vez que estuvieron en la sala volvieron a cambiar su forma humana quedando uno frente al otro, se miraron a los ojos y en ellos solo había un amor indescriptible que se querían transmitir, se sentían uno parte del otro.

El deseo estaba en el aire, pero más que un deseo ocasionado por su celo, había amor; no era la primera vez que se veían desnudos, pero debían admitir que sus cuerpos ya no eran iguales, habían cambiado luego de su presentación, Mew estaba más alto, con un torso ancho, su pecho duro y sus abdominales marcados, sus caderas se habían estrechado, estaban definidas muy marcadas, sus piernas daban la ilusión de ser más largas, musculosas cubiertas de vello y ni que hablar de su miembro viril, este había crecido en tamaño y grosor, tanto que a Gulf lo hizo tragar grueso imaginando que todo eso entraría en él en poco tiempo.

Hay que destacar que el omega tampoco se quedaba atrás, él estaba más esbelto, sus caderas estaban más marcadas al igual que su trasero, sus piernas torneadas y bien definidas, tan largas que no parecían terminar; ambos jóvenes se veían con lujuria, el celo por fin había terminado de alcanzarlos, siendo el omega el cual dio el primer paso, poco a poco comenzó a caminar contoneando sus caderas de manera sensual, seduciendo a su alfa, cuando estuvo en frente de él subió sus brazos hasta su cuello para acercar sus frentes.

—Te amo—. Fueron las primeras palabras que salieron de sus labios después de todo lo que había acontecido. —Serás mi primero y mi único, eres mi principio y mi final, tú eres mi destinado.

Esas palabras activaron algo en Mew, sus instintos primitivos lo llevaron a tomarlo de la cintura y acercarlo a su cuerpo, haciendo que sus erecciones se rozaran y provocaran un gemido por parte de Gulf, sus bocas se acercaron hasta empezar un beso tierno, amoroso, que poco a poco fue subiendo de intensidad, el alfa introdujo su lengua rozando la contraria, explorando cada espacio de sus bocas, provocando el éxtasis en el omega, quién empezó a despedir su exquisito olor a caramelo, seduciendo aún más a su amor.

Mew recorría con sus manos la espalda y la cintura de Gulf hasta llegar a sus glúteos, apretando, amasando esas carnes que ya consideraba suyas, mientras que sus labios hinchados continuaban aquel beso que solo se veía interrumpido para tomar aire.

Estaban siendo guiados por la pasión y el amor, sin separar sus cuerpos Gulf rodeo con sus piernas la cintura de Mew y se dirigieron a la habitación, no habían flores, no habían olores extraños, no habían velas aromáticas, solo estaba una habitación común y corriente, según la costumbre de los cambia formas no era adecuado que en la consumación del primer celo hubieran olores extraños a la pareja, era un momento en el cual los olores de alfa y omega se mezclarían, que se reconocerían como uno solo.

Pero eso no impidió que la atmósfera fuera romántica, una enorme y bella cama cubierta de sábanas blancas, representando la pureza de su amor ocupaba la mayor parte del espacio, Mew recostó a Gulf con delicadeza y con cariño empezó a besarlo en la frente, en los ojos, en las mejillas, se despegó rozando sus narices para que con todo el amor que podía expresar decirle:

—Te amo, eres mi principio y mi fin, eres mi omega, mi destinado, el que liderara está manada en un futuro a mi lado, la luna ha bendecido nuestra unión que durará más allá de esta vida...

El Destino De La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora