Un Corazón Dominante [Omegaverse] (EDITANDO)

Armando todo poco a poco para entrar en la vida del otro

Aún no pensaba dejar de besarlo de esa manera que de verdad extrañó tanto tiempo. Hizo que se acostase sobre el sofá y se colocó levemente sobre el Omega que aunque intenté hacerte el duro, realmente estaba disfrutando del tacto de su boca junto con la otra del Alfa, que le hacía delirar por la manera en la que un astuto Namjoon movía la boca y enredaba la la lengua contraria de Seokjin.
Para él ahora no importaba dónde se encontraban, lo único que si le importaba era que después de tanto tiempo por fin podía besar al hombre que ha amado desde que lo vio por primera vez.

Con su mano derecha sobre la nuca de Seokjin y, la mano izquierda dando pequeños cariños sobre el rostro ya caliente del Omega. Namjoon sonrió para si mismo cuando logró sacar un jadeo que lo hizo ponerse de un modo que solo Seokjin podía ser capaz de hacerlo sentir.
Sus intenciones nunca fueron parar en ningún momento, mucho menos dejar al menos un poco de espacio entre ellos dos y seguir robándole todo el aliento al contrario.

Seokjin gimió nuevamente entre en beso cuando Namjoon astutamente le mordió el labio inferior y luego pasó al cuello. Todo iba subiendo de nivel para la pareja sobre el sofá, en una casa totalmente nada suya.
Para los dos esas sensaciones que tenían eran nuevas tanto como viejas, tenerse de esa manera después de años era realmente necesario. Era único.

—¡Kims esto no es un hotel!— una voz cerca del último escalón de las escaleras y alarto a los dos que se separaron—. No puedo creer que estén así de calenturientos en mi casa— su voz sonaba a indignación.

—Lo siento Jungkook— Seokjin se puso de pie al instante y se disculpó, la diferencia de su apariencia de hace rato era totalmente diferente. Su cabello estaba levemente revuelto y su cara más que roja con labios hinchados—. De verdad lo siento.

—No — está vez fue Namjoon quien habló—. Él sabe lo que de siente, solo que no es capaz de verte en esa situación— sonrió poniéndose hombro con hombro al lado del Omega—. Yo no me arrepiento, pero si diré que nos pasamos porque es tu casa.

Seokjin lo miró con la boca abierta y indignado por lo que escuchó le dió varios golpes a Namjoon en su pecho: —¡No me incluya! Tu empezaste todo.

—Y tú lo seguiste, no ví que te resistieras— le dijo Jungkook —. De verdad que se nota que se extrañaron.

Namjoon lo miró algo sorprendido pero luego sonrió encogiendo los hombros.

—¿Cuánto viste?— dejo de golpear a Namjoon y miró a su mejor amigo que parecía quería reír, pero se andaba aguantando las ganas.

—Lo suficiente para saber que de verdad estás enamorado de este tonto, como él de ti... Ya enserio Namjoon, ¿Porqué no lo marcas de una vez por todas?— lo miró —. Pero que no sea en mi casa, tengo un esposo durmiendo.

—¡JUNGKOOK!— le gritó el Omega al lado ese Alfa que estaba sonriendo de oreja a oreja —. ¿No que no querías a Namjoon?.

—¿Y quién dice que lo quiero?— sus cejas se elevaron un poco y luego nego riendo —. Hyung, aunque no lo diga en voz alta sé que se aman y la verdad es mejor que estén juntos.

—¡No!— gritó Seokjin —. Él me besó primero.

—Y tu segundo, fuiste quien metió la lengua — le dijo Namjoon que lo miraba totalmente divertido.

—¡NAM!.

—Es tan divertido verte así Hyung — reía Jungkook —. De verdad, ya sean felices y coman perdices para que así dejen de lado esa tensión que se traen.

—Ese es un sabio consejo— apoyó Namjoon —. Ahora sí nos permites nos iremos para que puedas descansar con jiminie— miró a Seokjin y sin decirle nada lo tomó en sus brazos y lo cargo como un costal de papas—. Me llevaré a esta dulce fiera— le dijo a Jungkook y salió.