8.2 The Hidden Truth

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Apenas cruce la puerta pude ver como miles de chicos cargaban todo tipo de juguetes y bromas. Toques, huevos, papel higiénico volando por todas partes. Gracias al cielo, todos eran lo suficiente educados para gastar sus bromas entre sus propios amigos y no con las chicas nuevas del colegío.

Pude ver del otro lado del pasillo a Paul mirándome con una sonrisa de oreja a oreja. Sus manos estaban sujetando papel higiénico. Le correspondí la sonrisa y camine rápidamente a lado de Kira antes de que Paul quisiera hablarme nuevamente. Kira estaba poniendo unas cuantas cosas en su casillero cuando la salude.

-     - Este será un día largo ¿no? – sonrío mientras cerraba su casillero y nos encaminábamos a la clase.

-          - No para nosotras, si tenemos suerte – reí.

Kira y yo llegamos temprano a la clase, así que nos sentamos relativamente cerca, esperando a que el entrenador llegara, ya que por alguna sorpresa, era nuestra primera clase del día. Mire como Scott junto con Stiles entraban a clase. El moreno le dirigió una mirada a Kira, por lo cual ella la correspondió con una sonrisa. Tuve que apretar los dientes para no reír ante la expresión de Scott y Kira de tontos enamorados.

-      - ¡Hijo de puta! – se escucho dentro del pequeño cuarto donde se supone que era la oficina del entrenador. Todos dentro del salón soltaron una pequeña risa.

El entrenador salió por fin de su oficina. Parecía estar bien, con la diferencia de que esta vez si estaba enojado. Sus pasos se escuchaban por todo el salón retumbando mis odios. Izquierda, izquierda, izquierda, derecha, derecha, izquierda. Su mirada viajaba por todos y cada uno de los presentes.

El entrenador comenzó a hablar, pero la mayoría de lo que dijo no le tome bastante importancia. Solo eran quejas acerca de las bromas que todos los chicos le jugaban año tras año. Mire por enfrente a Stiles que sonreía y reía de vez en cuando. Cierta alegría cruzo por mí al verlo bien después de todo.

No fue hasta que escuche un gran estruendo que preste atención a la clase. Gire la mirada hacia el suelo, donde un regalo estaba tirado, todo triturado, seguro por el pie del entrenador. Este miro a todos con sorpresa y abrió el regalo todo hecho pedazos. Una taza destruida se asomo por el papel luminoso.

-         - Que mala suerte ¿no? – me susurro un chico que se sentaba justo delante de mí. Traía puesta una camisa amarilla que hacía lucir sus pectorales. ¿Acaso aquí todos eran musculosos?

La clase paso rápido en realidad. Solo quejido de parte del entrenador, miradas entre Kira y Scott, y unos cuantos presentimientos míos de que algo iba mal, pero vamos, yo siempre sentía que algo iba mal, incluso cuando no lo iba.

Cuando salí del salón de clases, sentí un jalón que hizo que sobresaltara al instante. Al mirar a Stiles detrás de mí sentí mi respiración relajarse lentamente. Continúe caminando al apenas escuchar la palabra “foto”. No quería hablar del tema. Ya no la tenía, y eso era lo único que debía saber.

-        -  Vaya, eres muy insistente ¿sabías? Luchas por lo que quieres y simplemente no te rindes, eso te llevara lejos algún día – Stiles parecía orgulloso de lo que acababa de decir - ahora, déjame en paz.

-          - ¿Qué? Pero tú me acabas de decir que eso me llevara lejos.

-          - Sí, pero no hoy, desaparécete.

-          - Solo te pido que no puliques esa foto – Stiles me seguía el paso, a pesar de la velocidad en la que iba.

-     - ¿Sabes? Esa foto me corono victoriosa – Confesé por fin- le debo muchas cosas a esa foto, y tomando en cuenta que hace tiempo perdiste a mi perro y tuvo que salir en ese bosque tan tenebroso contigo, me debes una.

How long? (Teen wolf)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora