Cuando la edad necesaria llegó, Seokjin se casó, no por obligación sino porque era algo que todos hacían.
Su prometido, un lindo y muy elegante omega de clase alta, Kim Taehyung.
Taehyung quería a Seokjin, demasiado como para considerarlo amor. Seok...
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TaeHyung ingresó en la que había sido su antigua casa por años, tenía nervios por encontrarse con su madre y que esta le reprochara -como siempre-, que había fallado de nuevo. Estaba acostumbrado a eso, pero siempre sentía un inmenso nerviosismo como si fuera la primera vez. Aunque no la culpaba, esta vez había fracasado de la peor manera. Había durado más comprometido que casado.
Dos años de compromiso tirados a la basura solo por intentar hacer valer su opinión, ¿acaso él era quien estaba en lo incorrecto? ¿debió haber hecho lo que InHe le pedía y quedarse callado?
Incluso si TaeHyung se sintiera pisoteado, ¿no habría sido mejor de esa forma? Quizás ahora estaría con SeokJin en su nuevo hogar y no tendría que escuchar los reclamos de su mamá.
—¿Qué haces aquí? —Escuchó hablar a su madre desde las escaleras, quien lo veía con sorpresa.
—Voy a divorciarme —expresó con un largo suspiro, tal vez no era la mejor forma de decirlo pero tampoco quería alargar más las cosas, de cualquier manera tendría que darle la noticia en algún momento.
—Mejor que estés bromeando. —Le advirtió a punto de molestarse, no podía creer lo que su hijo le estaba diciendo.
—Ojalá fuera una broma. —TaeHyung se sentó en el sofá para descansar un poco, era un tanto largo el trayecto de la mansión de los Kim hasta su casa.
—¿Qué fue lo que pasó? —Le preguntó SooRin—. Quizás todavía podemos arreglarlo, hablar con InHe para que te dé otra oportunidad. —Ella sonaba tan desesperada, de ninguna manera iba a permitir que el matrimonio de su hijo fracasara.
—Yo lo dudo mucho -expresó con una gran tristeza—. Antes de venir, vi cómo la señora InHe iba en busca de mi reemplazo.
—No te dejes vencer, ve a buscar a SeokJin. —Más que una sugerencia, aquello parecía ser una órden y TaeHyung estaba cansado de eso—. No necesitas a InHe, solo basta con que convenzas a SeokJin de seguir casado contigo.
—Sin su apoyo no puedo hacer nada, en cuanto ella le diga que puede estar con la persona que él ama, SeokJin va a dejarme sin dudarlo -expresó con gran preocupación—. Voy a perderlo...
TaeHyung se quedó ido por un par de segundos, antes no había estado tan consciente de lo que estaba pasando hasta ese momento. De verdad estaba la posibilidad de que perdiera a SeokJin para siempre y solo por haber sido terco.
Tal vez si no hubiera dicho nada y hubiera obedecido a InHe, todo sería muy diferente. Estaba tan arrepentido.
—Todavía están casados -habló su madre de repente con mucho más ánimo—. Solo tienes que regresar a la casa y hablar con él, no importa lo que InHe diga, no es su decisión.
—SeokJin ya ni siquiera vive ahí -confesó—. Él y yo discutimos porque quería que nos mudaramos sin haber pedido mi opinión.
—Entonces llévate tus maletas y mudate con él —sugirió mientras le entregaba sus maletas a TaeHyung y lo levantaba del sofá—. Solo basta con que te disculpes y ya está, estoy segura de que va a aceptarte.
