Insomnia- BTS

Parte Dos

— No, yo misma lo hice...no es para tanto —

Juliette mostro una mueca de desagrado pero al mismo tiempo una sonrisa, solo queria aparentar de que no la crian asi.

— Anastasia ya se hará de noche... —

Una voz ronca y suave se escucho.

Alfred se levanto y estiraba las manos, balbuceo.

— Apúrate... —

La rubia hizo rodo los ojos y dijo con una voz alterada.

— Adelántate tu...yo seguiré aquí —

Hasta que se escucharon pasos y jadeos, una señora con traje de sirvienta, se acerco, agitada por haber corrido y cansada dijo 

— D-disculpe señorita Anastasia, usted y su hermano deben de venir ya... —

La mujer parecía triste, y la rubia solo se quedaba seria, Alfred suspiro y agarró el brazo de Anastasia bruscamente para irse, sin darse cuenta había un carruaje café delante de ellos, la boca de Juliette se abrió, era un carruaje muy grande y los caballos hermosos.

( ¿Son hermanos? ) se preguntó Juliette ( ¿Por qué ella se apoyaba en su hombro y le sonreía? Solo lo hacen los enamorados...¿no? ¿Porque pensé que eran novios? Ahgr...soy un desastre, e-eso esta mal)
Juliette se sintió mal por haber pensado así, aunque eso era muy raro, pero aun así se sentía culpable por ese pensamiento.

Después de unos minutos los vio irse en ese carruaje « joder, deben de tener mucho dinero »

La chica salía a pasear por algunos campos de su pueblo, pero ella presentía que alguien estaba con ella, que la perseguían, en fin debe de ser ese tipo de hombres por lo cual te insisten a no más poder, ella se acostumbró a recibir «el afecto de un hombre» su madre siempre decía « si un hombre te sigue a cualquier lugar que vallas...ese hombre te ama» además de que la castigaba por haber rechazado a varios hombres millonarios, siempre le repetía una frase « Debes de ser buena cocinera y tejedora, para conseguir un hombre millonario» también « Debes de ser tan sumisa como un conejo con tu esposo, si no te dejara» Juliette estaba cansada de eso... siempre tenía que hacer todo lo que le diga su madre.

Su madre no se preocupaba mucho que si Juliette cumplia con los estandares de belleza, por que ella ya era bella, cumplia con todo, una piel blanca y reluciente, no tenia ninguna imperfección y no tenia que ponerse cosas toxicas a su piel para poder aclararse, pero aun asi lo que resaltaba mas en ella no era su piel palida eran sus ojos de un café muy rojiso, un vampiro, su cabello muy oscuro y endulado que llegaba hasta sus muslos no tenia la necesidad de maquillarse, sus ojeras y parpados en si ya eran rojisos oscuros.

 Para ser una buena esposa y mujer « MUJER» eso es, tienes que ser educada y respetuosa, y conseguirte un hombre cual podría mantenerte, si le hace caso a la primera...eres facil, asi que no sirves hasta tu final, porque si no, no eres nada y eres carne para probar, si eres una mujer debes de se pura, no tienes que estar con ningun hombre a menos de que sea tu hombre que te acompañara por el resto de tu vida, cual llegues a morir junto con el, siempre recuérdalo, tú no eres nada si eres facil, la madre de Juliette siempre le decía que el hombre es lo mas magnifico, era muy fanatica de eso.

« Me encanta cocinar y servir a mi esposo »
« soy feliz con él, si me deja yo moriría »
« tengo que hacer cualquier malabar para que él no me deje»

Juliette siempre escuchaba eso cuando las amigas de su mamá la visitaban.

Empezó a sacar flores del campo, las más bellas, concentrada en eso...escucho una voz, masculina, pero no parecía del exterior si no en el interior, obviamente su cabeza (¿Estoy loca?) Esa voz seguía diciendo cosas incomprensibles, hasta que