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Capítulo 29

Xie Xun no entendía cómo había hecho enfadar de nuevo a Song Qingzhou.

Siguió mirando el Weibo de Song Qingzhou, empezando por los que leyó anoche y bajando hasta su despedida a los fanáticos después de un accidente automovilístico.

Al mismo tiempo, Song Qingzhou no tardó en casarse con él.

Obviamente, él y Song Qingzhou no se conocían, pero su madre decía que a Song Qingzhou le gustaba.

No le importó mucho en ese momento.

Xie Xun miró la foto de Song Qingzhou y pensó mucho, pero no pudo entender qué estaba pasando.

•••

Song Qingzhou estaba recogiendo los juguetes del gatito cuando la madre Xie llamó de repente.

Era la primera vez que recibía una llamada de la madre Xie desde que terminó su viaje. Antes, a menudo no recibía llamadas cuando estaba en el trabajo y tenía que responderle por WeChat.

"Zhou Zhou, ¿has estado ocupado últimamente?" preguntó la madre Xie.

"No, no estoy ocupado".

"¿Entonces te conviene esta tard? Quiero ir a verte".

Song Qingzhou hizo una ligera pausa. No estaba seguro de si debía decir que sí, en realidad, le gustaba estar solo.

"¿Estás muy ocupado?"  preguntó la madre Xie, sin escucharle.

"En realidad no. Si quieres venir, puedo ir a buscarte". Song Qingzhou respondió.

"Le pediré al Viejo Li que me envíe".

"Bien, llámame cuando llegues, te recogeré".

La casa de Song Qingzhou estaba en una buena ubicación. Tanto el balcón como el alféizar de la ventana podían tomar el sol, y el gatito trepaba por la estructura escalada y se acostó en la pila redonda.

Song Qingzhou secó la ropa en la lavadora, luego movió un taburete y colgó la delgada colcha en la barra de secado. Pero cuando bajó, accidentalmente pisó el aire y cayó al suelo, el taburete se volcó y le golpeó el pie.

El pequeño gato acostado en la pila redonda levantó de repente la cabeza, con las orejas movidas dos veces, y se dirigió hacia Song Qingzhou y maulló varias veces.

"Está bien Douding". Song Qingzhou frotó la cabeza del gatito.

Sólo me dolió un poco.

El tobillo de Song Qingzhou estaba un poco rojo por el golpe, y alargó la mano para tocarlo, pensando que debería estar bien.

"Miau~" Douding frotó la mano varias veces.

Song Qingzhou se levantó con el pequeño Douding en brazos y volvió a colocar el taburete en el interior.

El gatito le seguía, frotando de vez en cuando la pernera de su pantalón, como si tuviera hambre. Song Qingzhou fue a la cocina y le preparó comida para gatos, pensando que debía llevar al gatito a vacunar pronto.

Pronto llegó la madre Xie y Song Qingzhou bajó a buscarla.

La madre Xie observó los alrededores y preguntó con preocupación: "No parece una casa grande, ¿estás acostumbrado a vivir allí?".

Song Qingzhou asintió y dijo: "En realidad, vivo solo, hay suficiente espacio y estoy muy acostumbrado".

"Niño, ¿cómo es que no querías nada cuando te fuiste?" Cuando la madre Xie se sentó, Douding asomó la cabeza desde el cojín del lado, puso sus dos patas delanteras sobre el cojín y miró a la madre Xie con curiosidad.