25 de mayo
Luego de unos largos meses, hoy es el día de mi graduación, último día en la escuela y primer día para convertirme en un hombre de verdad. Hace una semana, Raquel y yo fuimos a la cita médica y el doctor nos comentó que la bebé podría nacer en cualquier momento, desde ahí ella empacó lo necesario en la pañalera para cuando sea el momento, tener absolutamente todo fríamente calculado.
Varios de nuestros compañeros ya saben de su embarazo, así que no lo piensa dos veces para acompañarme a la ceremonia de grado. Llegamos a la escuela y hay chicos apurados por todos lados, además de que fotos por doquier. Muchos de sus viejos compañeros se le acercan a acariciarle la tan abultada barriguita, la nena saldrá grande y fuerte.
Por los parlantes van nombrando a los estudiantes y luego de un rato me nombran a mí. Salgo a la cancha de fútbol y busco a mi familia en las gradas, no los veo. Escucho aplausos y silbidos que me llenan de una gran satisfacción, pues no fue fácil lidiar con el examen de final de curso. Al finalizar el llamados de los estudiantes, el director toma el micrófono.
- Bueno, primeramente quiero felicitar a todos mis egresados por haber culminado una de las etapas más importantes en la vida, haberse esforzado y dado todo su potencial para estar hoy aquí recibiendo su diploma. Me lleno de euforia y a la vez nostalgia, pues a muchos de mis estudiantes los conozco desde la primaria y es gratificante ver su superación pero a la vez es triste saber que no volveremos a ver sus travesuras. Espero que todos y cada uno de ustedes logre cumplir sus metas propuestas y que en un futuro que nos encontremos, ustedes me digan que son unos profesionales y que están alcanzando todos sus propósitos como tal.
Todos aplaudimos ante su discurso y varios profesores más pasan a dedicar unas palabras.
Se da finalización a la ceremonia y nos dirigimos al auditorio para hacer entrega de las togas y así ya poder irnos. Al salir, mamá me abraza sorpresivamente y casi al instante le correspondo el acto, luego sigue papá que por un pequeño rato rompe su armadura de titanio y la retoma una vez que se separa de mí, luego, siguen los gemelos.
- Ya estaba por irme de esa ceremonia, moría del hambre ahí adentro. - comenta Tyler
- Pues ya iremos a celebrar y a qué tragues como el cerdo que eres. - le responde Amalia
- No peleen chicos, ya están demasiado grandes para esas estupideces. - interviene mamá al notar que Tyler estaba a punto de decir algo.
Salimos del instituto, pero en medio de las charlas noto la ausencia de Raquel, detengo mi paso y la observó unos metros detrás así que decidí esperarla.
- ¿Estás bien, necesitas algo? - le cuestionó
- No, tranquilo, es solo que pesa mucho y me duelen los pies.
- Si gustas puedo llevarte a casa para que descanses, has de estar bastante agotada.
- No hace... ¡Carajo! - se dobla levemente y se presiona en la parte baja del estómago.
- ¿Qué pasó?
- Me dolió, me dió un calambre un tanto fuerte.
- ¿De verdad no necesitas nada?
Mi familia se da cuenta de nuestra ausencia y Tyler nos grita desde lejos.
- ¿Van a venir o no?
- ¿Te puedes esperar? Está adolorida, no la voy a jalar para que camine rápido.
Mamá se devuelve rápido y se acerca por el otro lado.
- ¿Qué tienes cariño?
- Un calambre, pero ya está pasando...
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🌼 En Los Ojos De Un Angel 🌼 [En proceso]
Roman pour AdolescentsElliot pasa de llevar condones en la cartera, a llevar en brazos un ángel y una pañalera, aprender a ser papá es una tarea difícil y más cuando no hay un apoyo materno. En algún momento tendrá ganas de tirar todo a la basura, pero los angeles son re...