Capítulo 7

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-¡Yay, Luke está aquí!- Exclamó Perrie con un falso entusiasmo en cuanto abrió la puerta principal.

Luke la miró y parpadeó un par de veces antes de soltar un bufido y hacerse paso al interior de la pieza. Miró alrededor mientras se quitaba su saco y botas y se adentró a la habitación.

-Hola a ti también.- Murmuró para sí misma. Cerró la puerta y regresó con ellos para encontrarlos riéndose de algo. -¿Quieres una?- Preguntó moviendo una botella de cerveza hacia Luke.

-Nah.- Negó con la cabeza y miró a Niall. -Iré a buscar algo mejor.- Dijo y salió de la habitación. Niall lo siguió con la mirada hasta que encontró a Perrie viéndolo y alzó una ceja.

-¿Qué?- Artículo con la boca sin sonido y con una sonrisa divertida.

-Tienes razón, es encantador.- Susurró para que solo él lo escuchara. Niall le sonrió con pena.

Luke era un chico grandioso, no era mentira todo ese asunto de "demasiado bueno para eso", pero parecía que con Perrie no se aplicaba igual y no entendía por qué. Cuando ella llegó a trabajar con ellos el año pasado todo parecía bien.

Luke era amable y servicial como siempre, pero cuando la asignaron para trabajar junto con Niall comenzó a ignorarla y evitarla lo más posible. Niall no lo notaba porque era sutil, pero ahora que Perrie lo menciono, era obvio. Aún así cree que hay una razón, una que debería ser importante si hace que Luke no la quiera cerca.

-Si lo conocieras bien sabrías que, de hecho, sí lo es.- Sururró de vuelta. Perrie rodó los ojos y se cruzó de brazos sin creérselo. -Solo digo la verdad.

-¿Por qué lo invitaste?- Preguntó en su lugar.

-No seas así, es mi mejor amigo, Pez. Está en esto tanto como nosotros.- Suspiró. Han sido mejores amigos desde que Luke llegó como pasante escolar hace 5 años y se ha esforzado mucho para aprender la elaboración del proceso. -Además no sabía que te odiaba.

-No la odio.- Dijo Luke desde la puerta, provocándoles a ambos un brinco por el susto. Miraba solo a Niall y no tenía expresión en su rostro que pudieran leer, pero en su voz se notaba una ligera inconformidad. -Pero no me agrada que hables de mí con ella de esa forma.

-No hables como si yo no estuviera aquí.- Reclamó Perrie, Luke la miró unos segundos antes de sentarse a lado de Niall y alcanzarle un vaso de tequila con hielo y un pedazo de limon.

-¿A las 3?- Luke preguntó, Niall asintió con una sonrisa y rió un poco, tanto por nerviosismo como por diversión, mirando entre ambos. La tensión era pesada, sí, pero los balbuceos de Perrie sobre no ser fan del tequila de todos modos y la sonrisa despreocupada de Luke le daban risa. -Uno. Dos.

-¡Tres!- Ambos mordieron su rebanada de limón y tomaron todo el líquido de golpe. Si tenía que estar ahí atrapado entre estos dos, más le valía a Liam tener buen alcohol en ese lugar.

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Por unos instantes todo era oscuridad, cayendo hasta que la luz reveló un restaurante. Ambos caímos sobre dos sillas en una mesa, la mía se fue para atrás haciéndome caer de espalda al piso. Siempre me reclinaba en las sillas hasta que sentía que el peso era suficiente como para no caerme, esa vez no lo controlé muy bien.

-¡Liam!- Zayn se asomó por sobre la mesa con el ceño fruncido en preocupación. Al ver que estaba bien negó con la cabeza en desaprobación, volviendo a sentarse en su lugar. Había un par de personas al rededor que dejaron de comer para ver el espectáculo. Me levanté sobándome la cadera y con la cara ardiendo de vergüenza. -Te he dicho que no hagas eso, ¿Acaso nunca-

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