Capítulo 6

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Recuerdos y pesadillas

El ruido de sirenas sonando a lo lejos me despierta, abro los ojos lentamente e intento moverme pero siento mi cuerpo fallar. Busco con la mirada alguna señal que me diga qué sucedió, pero el dolor me nubla la vista y soy incapaz de seguir despierta, así que caigo de nuevo en la oscuridad.
Escucho voces murmurando algo muy cerca de mi y el sonido de las sirenas que antes las oía a la distancia se sienten a mi lado. Abro los ojos y me encuentro en la camilla arriba de una ambulancia, la incertidumbre se apodera de mi, así que comienzo a moverme para entender qué sucedió, y a lo lejos lo veo; mis abuelos, con un charco de sangre a su alrededor.  Siento mi mundo derrumbarse, mi mente no razona, mi alma se desarma y la tristeza me recorre de pies a cabeza.
Corro hacia ellos en medio de la oscura carretera y al llegar a su lado, las primeras lágrimas empiezan a caer.
-Despierten por favor-me arrodillo ante los cuerpos de mis abuelos-no me dejen sola, se los ruego...-mi voz se quebra y siento los brazos de alguien rodearme por atrás.
-Se han ido cariño-susurran en mi oido-lo lamento tanto-termina con voz suave y yo me echo a llorar como nunca lo había hecho en toda mi vida, mientras las primeras gotas de lluvia comienzan a caer como si compartieran de alguna forma la tristeza que siento.
***
Despierto con la respiración agitada, el recuerdo de esa noche se ha convertido en una pesadilla frecuente este último tiempo, una situación que me ha marcado y por la cual no he podido ser la misma de antes. Siempre he pensado que la vida es injusta, porque nos regala pequeños momentos de felicidad que nosotros pensamos que serán eternos, pero en un solo abrir y cerrar de ojos nos damos cuenta que todo ha cambiado, la felicidad se esfuma y en su remplazo llega la tristeza, la cual te hunde cada día un poco más y cuando deseas salir, ya es demasiado tarde.
***
Llego al trabajo más temprano de lo normal, luego de la pesadilla que tuve no he podido conciliar el sueño, así que salir de la casa es mi única opción para dejar de pensar en todo.
-Buenos dias-saludo a Lissy, mi compañera de trabajo.
-Buenos días-saluda con una linda sonrisa antes de ir a atender una de las mesas.
Lissy es una de las chicas más lindas que he visto desde que llegué aquí, tiene una belleza innata y natural, por eso no me resulta difícil entender a todos los chicos que la invitan a salir o que le escriben su número de teléfono en la boleta junto a la propina, sin embargo, a pesar de que no tiene novio, rechaza a cada uno de ellos. Por lo que me ha contado en estas pocas semanas, le cuesta mucho confiar en los hombres, porque muchos de ellos la hicieron sufrir en el pasado y le quitaron el sueño de tener una relación bonita y sana. Lamentablemente puedo decir que la entiendo, yo también sufrí mucho por un hombre en el pasado, al principio de la relación era todo hermoso, incluso llegué a pensar que podía ser perfecto, pero con el pasar de los meses, todo se convirtió en una pesadilla, los gritos, las discusiones, llanto,sufrimiento, dolor, se hicieron parte del día a día de un ciclo sin fin que comenzaba una y otra vez.
Después de esa mala experiencia me prometí a mi misma que me cerraría por completo al amor, el problema fue que dentro de mis planes no estaba encontrarme a un chico hermoso, dueño de unos preciosos ojos verdes de los cuales no me he podido olvidar y cada vez que los recuerdo se me acelera un poquito el corazón.
Estamos por cerrar para ir a nuestro descanso cuando Lissy me pide que revise la carta porque hay que verificar que los precios estén correctos, así que le hago caso, y cuando reviso la carta que hay en el mostrador, mis ojos se posan directamente en un papel rosado que resalta en el blanco.
"Espero tener el privilegio de ver tu hermoso rostro de nuevo"
De: El desconocido que robó tu corazón.
Me quedo sin palabras. Este chico hará que me de un infarto con tantas sorpresas, recuerdo perfectamente cuando ayer le pasé la carta para que ordenara y dijo que lo que quería no estaba ahí.  Seguramente en ese momento, mientras yo lo observaba embobada, el pegó el papelito rosa. Al final de este, adjunta su número telefónico.
¿Debería escribirle?
Tras dudarlo unos minutos, tecleo los números en mi celular y le escribo.
Yo: Hola, desconocido
Luego de enviar el mensaje dejo a un lado mi celular, estoy nerviosa, y no ayuda mucho el hecho de que la respuesta tarde en llegar. El celular vibra en el bolsillo de mi pantalón, y lo saco tan rápido que termina resbalando y cayendo al suelo.
Estamos sentados en un parque, y ante tal situación, Tayler me da una mirada sospechosa  y se echa a reír.
Lo miro mal, y con la poca dignidad que me queda, me agacho a recoger el celular y ver el mensaje.
Desconocido: ¿Cómo está la chica más bonita de Ocean Side?
Me ruborizo y una sonrisa se escapa de mis labios. Tyler se da cuenta y me choca suavemente con su hombro.
-¿Me vas a decir quien te tiene sonriendo así?-dice curioso.
-¿Recuerdas al chico de anoche, el que me fue a buscar?-digo observándolo.
-Por supuesto,  ¿cómo no acordarme de ese tremendo dios esculpido por los mismísimos ángeles?-responde como si nada. Yo me echo a reír por su comentario y luego le cuento todo lo que estoy comenzando a sentir por aquel chico y asi pasamos toda la tarde, riendo y contando anécdotas y me doy cuenta que soy realmente feliz.


























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⏰ Última actualización: Feb 09, 2023 ⏰

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