𝕸𝖆𝖋𝖎𝖆 𝖇𝖔𝖘𝖘

26

— Nene tienes que dejarme que te explique, son videos antiguos de los que ni yo recordaba.

Felix no prestó atención a lo que decía y siguió mirando por la ventana.

Hyunjin suspiró sin decir nada más y esperes de que Mingyu se estacionara para poder bajarse del auto y llevarse a Felix a la habitación y cerrar la puerta con llave.

— ¿Qué haces? No quiero hablar contigo.

— No podemos estar peleados amor, arreglemos esto. — Hyunjin tomó sus mejillas, — Hagámoslo como mejor sabemos hacerlo.

— No podemos arreglar nuestros problemas con sexo, Hyunjin.

— Solo... Una última vez.

Felix no pudo responder debido a que Hyunjin ya tenía su boca sobre la suya besando sus labios, sus grandes manos bajaron a las piernas de Felix levantándolas haciendo que las enrollara en su cadera y sujetándolo de su trasero.

Sus besos esta vez los dejó en el cuello del omega, quien gemía cerca de su oído haciendo que Hyunjin tuviera ganas de romperle la ropa ahí mismo, pero decidió llevarlo a la cama para seguir con sus besos en sus tetillas y sus manos bajando sus pantalones.

Felix ya se había quitado su polera quedando casi desnudo frente a Hyunjin, lo único que le faltaba era su bóxer, que Hyunjin no dudó en quitárselo dejando su miembro ya erecto expuesto ante el alfa.

Le mostró dos dedos que Felix chupó y Hyunjin los llevó hasta su entrada ya mojada y algo rosada, movió sus dedos ya adentró de su omega en forma de tijeras y en círculos. Tratando de expandir su entrada lo más que pudiera para que no le doliera tanto, porque a pesar de que fuera una bestia mientras lo follaba quería que estuviera bien y no sintiera nada más que placer.

Cuando ya estuvo listo ahora Hyunjin quitó su polera y sus pantalones, alineando su miembro en la entrada de su novio.

Poco a poco fue entrando en él, haciendo que Felix gimiera y el soltara un pequeño gruñido debido a que las paredes de Felix se ajustaban a su tamaño dejando su pene algo apretado.

Pero la satisfacción era mucho más.

— Hyunjin... Muévete.

Y el alfa acató a las órdenes de su omega, comenzó con un vaivén lento con sus caderas sin ser muy bruto. Felix lo atrajo para besarlo mientras que el seguía con sus movimientos y sus manos en los muslos de su omega.

— Ahg... — Gimió el omega en su boca. — Más rápido.

Hyunjin solo complacía a su omega, así que aceleró sus movimientos haciendo que sus testículos chocaran contra las nalgas de su novio, iba rápido pero sin llegar a ser duro.

Felix estaba con sus ojos cerrado disfrutando de cada segundo que su novio lo acariciaba o besaba, no creía que esto resolvería el problema que tenían, pero definitivamente necesitaba algo así y más en estos momentos.

Felix necesito solo un par de estocadas más para poder correrse en su vientre, Hyunjin en cambio siguió con unas más y se corrió dentro del omega.

— Ven nene. — Felix se acercó a él con cuidado de sentir dolor debido al nudo, Hyunjin lo abrazó y besó su hombro. — Lamento todo esto.

— Está bien amor, no pasa nada.

Felix besó su mejilla y lo volvió a abrazar.

— Jinnie.

— ¿Si?

— Quiero que me marques.

Hyunjin se separó un poco del abrazo y lo miró.

— ¿Seguro que quieres? Literalmente eso es como un amarre hacia mi ¿Y si me dejas de amar? ¿O te gusta alguien más? Nene yo no...

— Eso jamás pasará, por eso quiero que lo hagas, te amo Hyunjin, eres mi alfa y el único que quiero en esta vida. Mi corazón te pertenece y quiero que me hagas tuyo de esa forma.

— Eres mío con o sin mi marca.

Felix nuevamente lo besó con amor y dulzura, tal como lo hacía siempre, porque Felix lo amaba tanto que quería su marca. De hecho, ahora sabía que probablemente quedaría embarazado por el nudo y eso lo hacía más feliz, formar una familia con Hyunjin era lo que más quería.

Hyunjin mostró sus colmillos haciendo que sus ojos se volvieran de un color amarillento, acomodó un poco a Felix y lo mordió.

Felix gimió un poco por el dolor de los colmillos de Hyunjin perforando su piel, pero ahora estaba feliz por ser completamente de su alfa.

Hyunjin retiró sus colmillos de su piel sintiendo ese sabor metálico característico de la sangre, sintiéndose algo extraño luego de haberlo mordido.

Pero ambos estaban felicesde poder estar juntos para toda la eternidad.