Evidencia

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Capítulo 9.- Evidencia

Pov ____:

Desde mi posición miré a ese chico con desprecio, y aunque mis manos temblaran, jamás dejaría que Jungwon volviera a ser lastimado.

Esa era un promesa hecha por mí y la cumpliría. Costará lo que costará, inclusive si eso significaba perder la vida.

Al no poder hablar, con un poco de magia hice que en la tierra escribiera lo que estaba pensando.
Pero un claro y directo “no” se escuchó, dejándome en claro que él ya sabía quién era yo.

Sin resignarme giré levemente mi cara para poder mirarlo, un rostro llenó de aberración hacia mí.

— Acabaré con los dos — dijo firmemente mientras me sostenía con fuerza el tobillo.

Al ver que no era liberada, el otro sujeto aprovecho la oportunidad para atacarnos, con preocupación mantuve un hechizo de protección para que nosotros tres no fuéramos derribados ante tal calamidad.

Nerviosa coloqué los abanicos a mis costados donde tenía algunas agarres para atorarlos y así tomar el rostro de Jungwon.

Realmente no sabía que hacer pero solo transcurrió algo inesperado.

— “Jungwon, déjala, ¡déjala ir!” — dijo, transmitiendo sus palabras en escenas que yo solo podía mostrar pues eran las mismas que a mí me permitía ver cada que ella me visitaba.

Desde lejos lo veía, a su preciado hijo, mientras que él abrumado abría los ojos con sorpresa, y de esa manera supe cual era la habilidad de Jungwon en su lado vampirezco.

Podía ver recuerdos y alterarlos a su disposición pero está vez no porque se trataban del presente, el presente de su difunta madre.

Luego de dudar, me había soltado y más tranquila volví a mostrarle mi agradecimiento a través de escritos junto con una orden.

vete”, fue lo que había puesto pero una vez más se había negado...

— ¿Qué haces Jungwon? — preguntó la mal herida.

— Llevaré a Annette a un lugar seguro, en cuanto vuelva quiero que me digas que es lo que acabo de ver — tragué duro porqué para ese entonces yo no estaría o al menos eso planeaba.

Asentí, prometiendo algo que no iba a suceder de tal forma que creé una abertura para que estos dos se fueran.

Ahora a solas quité por completo aquella protección para quedarme frente a frente con el malo del cuento.
Golpe tras golpe, algunos acertados y otros no.
Sus expresiones decían que él estaba ganando y era verdad.

Ante la desesperación ocupe mis armas contra suya pero su magia tan poderosa y fascinante dieron una vuelta de ciento ochenta grados, esperen ¡¿magia?!

— ¡¿Qui...én er... es t...tú?! — le pregunté cortamente ante su agarre dejándome vulnerable.

Él era como yo o... ¡no!, ¡él era una versión mala de mí!

Entre risas, me miró detenidamente levantando una mano suya.
Un dolor inexplicable recorría mi cuerpo, ¿qué era esto?

— Despídete de está vida — soltó con una sonrisa tan cínica.

¡Esto era el arrebato de un alma!, ¡¿cómo?!

Sin bromear, ví una destellante luz iluminar todo el lugar, un hermoso paisaje se mostraba y un señor, el mismo del hospital, miraba dicho sendero.
Al darse cuenta de mi presencia exclamó con negación, según entendí, algo andaba mal.

Odd Eye (Jungwon & tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora