/Cap 4/ Nuevo

970 101 15
                                    


/Shinso/

Después de que Monoma me llevara hasta la enfermería, y descubriéramos que la enfermara no estaba, el rubio paso con total confianza buscando las cosas para desinfectar mi herida.

- No pasa nada, a Recovery Girl no le molestará que use un poco de esto.- me dijo, casi como si hubiera leído mis pensamientos.

- ¿Recogery Girl? - cuestione.

- Así la llamamos. Ella es casi como una superhéroe por lo rápido que te hace sanar. - me explicó mientras me indicaba que me sentara en uno de los bancos para que después tomara mi mano con el rasguño.

Tan pronto puso el alcohol en el rasguño hice una leve mueca por el ardor.

- Disculpa, pero será rápido. - volvió a hablar sin mirarme a los ojos. Y sí, en realidad en tan sólo unos segundos más ya me había desinfectado y ahora simplemente me colocaba un curita.

- Eres bueno. - dije viendo mi mano en donde ahora se encontraba un curita blanco con la cabeza de un gato.

- Claro que sí.- decía orgulloso para después soltar esa rara risa suya.

- Bueno, ya me tengo que ir. Gracias otra vez... - le comenté mientras me levantaba para irme. Monoma simplemente me dedico una sonrisa ladina. Aunque parecía que quería decirme algo más, ningún otro sonido salió de ambos y así me fui.

. . .

Al día siguiente me desperté con un poco de dificultad, y es que no había podido dormir tan bien debido a que este día tan esperado por fin había llegado.

Pero bueno, me aliste para poder irme a mi nuevo edificio con calma. No tenía ningún problema en llegar, pues ciertamente gracias a mí encuentro con Monoma ya sabía dónde estaba la sala de profesores. Y sería ahí donde por fin me dirían a qué salón pertenecería de acuerdo a un examen que previamente había hecho.

Y al parecer, estaría en el salón 3A, así que el profesor Aizawa -docente al cual admiro...- me guiaría a mi nuevo salón.

Seguí a Aizawa-sensei de cerca, pero también poniendo mucha atención en todos los detalles que me rodeaban hasta que llegamos al dichoso lugar.

- Escuchen mocosos, desde hoy Shinso Hitoshi se unirá a este grupo.- hablo el profesor, al cual no había dejado de mirar.

- Es un gusto conocerlos. - fue lo único que dije con una leve inclinación. Entonces por fin puse atención a mis compañeros. Rápidamente reconocí una cabellera verdosa, se trataba de Midoriya, chico que había conocido durante el festival deportivo debido a haber competido como representantes de nuestros edificios.

- Puedes tomar asiento en el fondo, al lado de Denki. - comentó el profesor. Y así pose mi mirada en el asiento vacío que señalaba, tornado también a ese chico... el chico de cabello amarillo y ojos ámbar, cuyo nombre al parecer era Denki.

- Hola.- hable una vez estaba junto a mi asiento. Y la verdad hasta yo me sorprendí, pues por alguna razón tenía ganas de hablar con el rubio.

- Hola...- fue lo único que dijo, poniendo una pequeña sonrisa, la cual me pareció adorable. Pero rápidamente noté como sus ojos reflejaban tristeza. Eso me llamo mucho la atención, así como la primera vez que lo había visto.

- ¿Cuál es tu nombre?- le susurre, intentando hacer más conversación.

- Kaminari Denki.- me respondió, pero sin prestarme mucha atención, ya que parecía que tenía un lío en su cabeza.-  Oye amigo, ya sé que soy genial pero ¿podrías dejar de distraerme? - me dijo, ahora con una sonrisa más divertida, pero igualmente esa expresión se esfumó rápidamente. Al parecer lo había estado observando mucho... pero en serio me causaba cierta curiosidad, quería conocerlo, quería saber porque sonreía a pesar de que en el interior parecía sufrir.

- Pff... que aburrido eres.- trate de provocarlo para seguir hablando.

- ¡Oye! ¡Yo no soy aburrido!- se quejó en voz alta.

- ¡Manténganse callados allá atrás!- nos regaño el profesor, para después seguir anotando algo en la pizarra. No pude evitar reír un poco, seguramente ya me había vuelto loco; y es que no tenía pensado que me llamarán la atención desde el primer día y a primera hora por molestar a un compañero.

- Cálmate rubio, no era para que te molestaras tanto.- le dije aún con una sonrisa debido a la situación que había generado. Y al voltearlo a ver noté como tenía un ligero sonrojo... otra vez me parecía adorable. Al parecer todas sus expresiones llegaban a ser adorables.

- No... sé que pretendes, pero te lo dejaré pasar por esta vez.- me dijo un poco nervioso. Inconscientemente volví a sonreír.

- Una última cosa, ¿podrías guiarme por el edificio durante el almuerzo?- le cuestione.

- Mmm... sí... está bien ...- dijo por fin, ya más calmado pero aún con su ligero sonrojo.

- Te vez más lindo así, Kaminari-kun. - comente. Y es que era verdad, cada una de sus expresiones eran lindas, y me parecía que su forma de ser también lo era. Pero por alguna razón no podía brillar del todo, algo le entristecía y quería saber que era.

- ¡Cállate chico raro!- exclamó.

-¡Les dije que se callaran!- gritó Aizawa-sensei, haciendo que nos asustáramos. Entonces ambos nos miramos de reojo para después reír con complicidad. Su risa también era linda.

Ese pensamiento /ShinMono/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora