Una vida demoniaca

Capitulo 6

Punto de vista de Scott

Se me erizo la piel al escuchar la voz diabólica de Asael en el cuarto

- Ya escuche todo - dijo el demonio con indiferencia.

Mierda, mi plan ya no servirá

- Y... ¿Qué tal si hacemos un trato? - cruzo lo brazos y sonrió con picardía, por un momento lo creí gay

- ¿Qué clase de trato? - mi cara de asco de hizo presente mientras Zack nos observaba con diversión, solo faltaba que trajera palomitas y se burlara de la situación, ¡genial!

- No soy gay idiota - eso me alivio demasiado

- Bien...¿qué quieres?

- Tu vez a Elizabeth y yo veo a Jane - al decir el nombre de aquella rubia mi corazón latió más rápido y una sonrisa instantánea se formó en mi rostro

- ¿Y cuál es la trampa? - Era demasiado bueno para ser verdad, y Asael no desperdiciaba ninguna situación por más mala o buena que fuera

- ¿Trampa? - dijo confuso

- Vamos Asael no tengo tiempo para juegos, es demasiado bueno para ser verdad - Zack seguía viéndonos con intriga

Y dijo lo que nunca me hubiese esperado

- No hay trampas

Sonreí, pero esta vez la sonrisa no era falsa, podría ver a Elizabeth y explicarle todo, ansiaba verla como nunca

- ¿Y cuando pasara eso? - respondi tratando de ocultar mi emocion

- Esta noche - dijo el demonio con una sonrisa en el rostro

- ¡Genial!

- Te veo en una hora en tu casa - y sin mas se dio la vuelta y se esfumo, me voltee hacia Zack y como gesto de despedida le dedique una sonrisa y me esfume

Punto de vista de Elizabeth

Me encontraba viendo una película demasiado triste, se llamaba "Cicatrices" y estaba comiendo un precioso helado de yogurt, una vez mas me entro la depresion por pensar en todo lo que paso, y pensar en Scott me ponia aun peor, esto no era sano, empezaria a hacer algo productivo por la vida, naaahh, mejor mañana, llevaba 2 dias son ir a la universidad, la verdad no estaba de humor para nada, ni para estudiar

El tono de mi celular se hizo sonar, mire la pantalla y habia una foto de Jane y mia donde saliamos ambas con la lengua afuera, sin dudarlo conteste

- Hola Jane

-Hola Elizabeth- hablo con demasiado entusiasmo

- Que hay de nuevo?- dije, dandole una cucharada al helado y deleitandome con su sabor, ¡valla que amaba al helado!, ¡BENDITO SEA EL CREDOR DEL HELADO!, Wow estaba siendo algo exagerada pero era cierto.

- Hoy pasare por ti a las 8, ponte guapa

- ¡Pero no quiero ir!

- No importa, paso por ti a esa hora- dijo decidida

¡Demonios!, eran las 7:38 p.m y ella pasaría dentro de casi 20 minutos, me levante y encendí la luz, guarde lo que quedaba de helado en el congelador, y subí a mi cuarto, fui directo al cuarto de baño y me desvestí rapidamente y abri la llave de agua dejando caer el agua tibia, me lave el cabello rapidamente y tome la toalla azul, salí a mi cuarto y camine hacia el armario, lo abrí y recorde aquella pesadilla, me estremeci al tenerla en mente, tome unos vaqueros negros y una camiseta blanca con el logo de The Rolling Stones, amaba esa lengua afuera, me vestí y tome unas converse blancas que me llegaban un poco mas arriba del tobillo, ate las agujetas y fui otra vez al cuarto de baño a arreglar mi cabello, encendi la luz y vi una gran sombra negra a travez del espejo, pasando tras de mi, me voltee con todo el miedo del mundo y no me encontre con nada fuera de lo normal, mi respiración estaba agitada y mi corazon latía como loco y mi mano fue directo a mi pecho para intentar calmarlo, mi respiración era irregular. ¡Dios!, que había sido eso.

Trate de olvidarlo, tome el cepillo y me peine el cabello, lo deje suelto alrededor de los hombros, voltee una vez más confirmando que no había nada o nadie allí. Salí del baño y me dirigí a la sala a esperar a Jane.

Punto de vista de Jane

Asael me había dado una maravillosa noticia, ¡Scott y Elizabeth se iban a ver!, Eso era grandioso, ella sabría toda la verdad, y como era tan buena amiga la había llamado y le dije que se arreglara, así estaría linda para Scott, luego la llamaría para saber como le fue, Asael estaría conmigo y Elizabeth con Scott por un buen rato

- ¿Quieres salir a cenar? - pregunto Asael

- ¿Y si mejor cocinas tu? - dije mientras me rodeaba con sus brazos regalándome una sonrisa de la cual me enamoraba todos los días

- Sabes que soy pésimo en la cocina - puso una mueca muy tierna y me beso en la mejilla y se puso de pie. - Vamos a cenar, iremos a un buen lugar - me guiño una ojo y extendió su mano para que la tomara y lo hice, me levanté y me quede mirando sus ojos como si fuese la última vez

- ¿Qué? - pregunto con curiosidad

- Nada - lo di un corto beso en los labios y camine hasta la mesita para tomar mi bolso.

Asael me tomo de la mano y juntos caminamos hacia afuera hasta su auto, era un hermoso deportivo rojo

Me abrió la puerta del copiloto

- Valla, todo un caballero - dije sin quitarle la mirada, en forma de respuesta tuve una sonrisa

Punto de vista de Scott

¡Wow!, valla nervios que atacaban, ansiaba ver a Elizabeth y contarle todo, la amaba y planee todo para poder estar juntos

Punto de vista de Elizabeth

Estaba en el sofá, como Jane no llegaba volví a sacar el helado y prendí la televisión, ahora estaba viendo una novela, era de lo más dramática, empece a cambiar canales y me aburrí, apague la tele y subí a mi habitación con el bote de helado en brazos. Llegue a mi habitación y saque mi laptop y tome asiento en mi cama, encendí el aparato y espere, mientras le estaba dando cucharadas al helado. Cuando por fin se encendió note que esta no era mi laptop ¡Demonios!, Era la de Scott, ¿Cómo carajos llego aquí?, okno estaba diciendo muchas palabrotas al mismo tiempo, al reaccionar estaba la opción: "Desea registrar las cámaras de la casa", no dudé en aceptarlo, pero luego me pidió la contraseña, ¡Rayos! hmm, piensa Elizabeth cual puede ser, excto, eso debía de ser, ingrese mi nombre y todos los vídeos aparecieron al instante, apareció el video de la muerte de Scott.... Cuando estuve a punto de darle click una sombra negra se hizo presente en el cuarto y luego Scott apareció entre ellas

- Hola Elizabeth - me regalo la sonrisa que me volvía loca cada de la vida

- Scott.....- dije con una lágrima rodando por mi mejilla, pero esta vez era una lágrima de felicidad