El encuentro

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Jake: Nicole...

X: No puede responder, que lastima le quitaría la mordaza, pero todavía no tiene derecho a hablar, está castigada ¿sabías que tenía un arma? (dirigiéndose a la chica) las armas son muy peligrosas en manos de quienes no las saben utilizar, te podrías haber hecho daño...

Se acerca un poco más, a centímetros de rozarla, ella reacciona empujando su cuerpo hacia atrás moviendo levemente la silla, pero el guardia detrás la detiene.

Jake: ¡no te acerques a ella! ¡Si le haces algo te juro que...

X: ¿Así? ¿Y qué es lo que harás? Te recuerdo que acá, están las personas más importantes en tu vida, no estas en posición amenazar, así que guarda ese enojo para ti, ahora... te exijo que me entregues el programa y será sin trucos, lo quiero completo, solo para mí.

Jake: ¡Lo haré! Nymos será tuyo y haré lo que tú quieras, pero déjalos en paz.

X: ¡Si!!! ¡Suplica por ellos! ¡Ja, ja, ja me encanta ver tu expresión!

Pero antes, el drama de esta novela patética entre ustedes no acaba... sabes, no me gustan las mentiras... Nicole yo soy un hombre honorable y de palabra, gracias a mí estás aquí por Jake o quizás... ¿por Diego? ¿Tendrás que elegir únicamente a uno de ellos, a quien elegirás?

Nicole se gira y sus ojos se agrandan al ver la escena, los dos hombres que de alguna manera habían cambiado su vida, por un lado estaba el chico que era el origen de una investigación de suspenso e intrigas, lo que llevo a cambiar su vida completamente, pero además de ello a una extraña historia de amor, jamás hubiera pensado en la posibilidad de tener sentimientos hacia un hombre el cual jamás había visto, pero el conocer sus sentimientos, su forma de ser, la confianza que tenía en ella y la forma en que la protegía, provoco un encanto en ella, una atracción que no podía controlar.

Y frente a el, Diego el que le había devuelto la esperanza de sentir amor, borrar el pasado y comenzar un nuevo camino junto a él, en poco tiempo logró invadir su mente de pensamientos positivos y por esos instantes olvidaba su dolor.

Entonces al medio de ambos en una camilla de hospital se encuentra otro chico, claramente está demacrado, su débil cuerpo casi inerte producto de la perdida extrema de peso, pero aun así Nicole observa su rostro el cual es angelical, su cabello semi largo de color cobrizo y su piel blanca y delicada como la nieve, hace que resalte su bellesa aún más.

- (¿Quién es este chico? Jamás lo he visto... seguro es el otro amigo que Jake menciono... su nombre... no lo recuerdo, ¿cual era?...)

X: Déjame ayudarte ya que debes estar algo confundida con todo esto, aunque ya los conoces o al menos eso es lo que crees o... me equivoco Michael.

- ¿Michael? (¡es él! Pero si él ayudó a este tipo a encontrarlos, es imposible en su estado es incapaz de hacer algo así, apenas puede mantenerse despierto...)

¿Qué le has hecho? Te ayudó y lo paga de esta manera... ¡Eres un animal sin corazón!

X: claro que puedo y no me arrepiento, aunque él es el más inocente de todos los presentes junto contigo, pero como suele ocurrir ustedes son los que deben terminan pagando por los pecados de otros, se hubiera evitado tanto sufrimiento, pero no cooperó, jamás entregaría a su querido amigo, no me dejo opción.

Jake: Por favor déjalos en paz, te entregaré el programa, tendrás todo lo que siempre quisiste, todo el poder para hackear lo que quieras y nadie podrá detenerte... Haré todo, todo lo que me pidas... pero por favor... ellos... ellos no pueden pagar de esta manera, no hagas esto, aun estas a tiempo de revertir esta situación.

Duskwood, Amigo Dame Tu ManoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora