Sangre en mis manos

217 22 11
                                    

Este es largo. Pero ahí está.

Capítulo 2

...

Sangre en mis manos

...

La joven maga seguía sobre la cama, entrecerrando sus ojos en un intento de ver del otro lado de la línea de luz plateada que entraba por la pequeña ventana del techo.

-¿Garen? -Preguntó la rubia somnolienta, sentándose a la orilla de la cama-.

La pelirroja recuperó el aliento de a poco.

-¿Quién está ahí?

-...

-¿Por qué no te acercas a la luz?

-Demasiadas preguntas.

-¿Eres un guardia? ¿vienes aquí a molestarme?

Katarina se mantiene inmóvil por unos segundos y alinea su espalda.

Lux seguía el sonido de las botas con la mirada, forzando su vista en seguir una línea de sonido en la oscuridad.

-Te meteras en problema si te encuentran aquí, debe haber por lo menos tres guardias tras esas puertas.

-No estaría muy segura de eso.

La chica guardó silencio unos momentos, no entendiendo del todo aquel comentario.

-Aún no se quien eres.

-¿Es necesario?

-Quiero saber quien me acompaña esta noche.

Katarina dio un paso al frente aún sin tocar la luz de luna. Lux divisó los ojos verdes a travez del manto luminoso.

-Tus ojos, son... -Respondió ladeando su cabeza, tratando de aclarar la imagen frente a ella-. Tú... no eres Demaciana.

-Parece que no eres tan cabeza hueca después de todo -Respondió cruzándo sus brazos-.

-¿Quién eres?.

-...Buena pregunta.

-...

-Digamos que somos, rivales.

Katarina dio un segundo paso al frente parándose en la luz de la luna.
En ese instante Lux sintió sus músculos tensarse.

-Eres... Noxiana.

-No eres muy perspicaz ¿verdad?.

-¿Qué es lo que quieres?

-¿Qué nunca te callas? no tengo tiempo para esto. -Respondió caminando hacia ella-.

-¡Eres esa Noxiana! la de la cicatriz en el ojo.

-Entonces si me conoces. -Sus pasos se volvieron lentos-.

-Se quien eres. Participaste en numerosas peleas contra Demacia.

-Entonces sabes que tengo experiencia asesinando Demacianos. -Concluyó acercándose a la chica-.

-¿Qué es lo que quieres? Aléjate.

La maga se arrastró hacia atrás en el delgado colchón. No entendia nada.

-Vamos, de cualquier forma te pudrirás en esta celda. -Respondió subiendo los escalones de forma amenazante-.

Katarina sacó una daga de su pantalón, empuñándola al mismo tiempo que se acercaba a la joven.

La rubia tembló ante tal acto, pegando su espalda contra la pared, arrinconada.

En un acto de desesperación. tomó la almohada junto a su cuerpo y golpeó a la asesina con fuerza en el rostro, haciéndola perder el equilibrio. Ante el abrupto movimiento la maga se escabulló con rapidez por el lado contrario del que se tambaleó la pelirroja.

"Veneno externo"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora