Atrapando una mariposa

CAPITULO 18 🦋

Delizo la ropa sobre mi cuerpo, el me espera sentado en el borde de la cama. Siento su mirada, estudia cada parte de mi cuerpo, muerde su labio inferior a la vez que levanta la mano invitandome a tomarla.

Me acerco y Jimin me acaricia la cintura, con delicadeza me eleva para sentarme a horcajadas sobre él. Su tibio y dulce aliento roza mi piel.

Beso sus labios, y me pierdo en el éxtasis que me produce sentirlo dentro, lo acuno en mi pecho.

—Ava te amo —las palabras erizan mi piel.

Levanta el rostro pero no puedo dar crédito a lo que veo. Esos profundos ojos avellanos, los hoyuelos adornando sus mejillas.

Jimin se ha esfumado, estoy haciendo el amor con Nam.

—Te amo Ava —lo dice de nuevo  mirandome a los ojos.

Me siento de golpe en la cama, todo fue un sueño. Veo el reloj de mi mesita de noche, son las 4:25 AM. Volteo a mi lado, Jimin duerme plácidamente, con el torso desnudo.

Paso las manos sobre mi rostro, tratando de comprender lo que acaba de pasar. Estoy agitada y el sudor recorre mi frente, es entonces que reacciono. Lo único que me faltaba, soñar que lo hago con Nam.

Me levanto al baño, mojo mi rostro y me miro al espejo.

—Bien... ¿Y ahora qué Muller? —suspiro pesado y me meto a la regadera.

El agua tibia me relaja, pero se siente mal, esto no está para nada bien. Hace unas pocas horas hice el amor con Jimin y ahora sueño que es Nam.

Estoy muy jodida, si sigo así cualquier día... ¡No! alejo ese pensamiento de mi mente, no puedes hacerle esto a ninguno de los dos.

Salgo del baño con una toalla en mi cabello y otra enrollada en mi cuerpo. Me escabullo de la habitación hasta la cocina, sin hacer ruido. Sirvo una copa de vino, tomo el celular de la encimera de la cocina. Pienso un par de minutos, y comienzo a redactar un mensaje.

“Nam necesito verte, ¿te parece en la florería a las 10?”

Mientras termino mi copa de vino recibo la respuesta.

“Claro mi niña, ahí estaré”

Trago con dificultad, pero está decidido, tengo que hacerlo, no puedo seguir así. Termino el contenido de mi copa, la lavo y regreso a la cama. Me recuesto sobre el pecho de Jimin, respirar su aliento y oler su aroma me adormece y caigo en los brazos de Morfeo casi de inmediato.

Jueves, 8:55 AM

—¿Puedes pedir pizza Ava? —rodeo su cuello y asiento—. Dios eres tan hermosa —me abraza con fuerza mientras besa mis labios de forma lenta.

—¿Te veo a las dos? —Jimin asiente, de a poco me suelta de sus brazos y se aleja—. No llegues tarde Mimi, o comienzo sin ti —le guiño un ojo, el sube a su auto y lo veo irse.

—Es un chico bastante guapo Ava —la voz de la señora Lily me hace saltar y dar un pequeño grito. Llevo las manos a mi pecho, giro sobre mis talones.

—¡Señora Lily! —la veo reír—. Casi me da un infarto.

—¡Oh! lo siento, no quería asustarte —me toma del brazo y comienza a caminar—. Vamos adentro, quiero saber sobre el y de paso haces mi ramo.

Tomo la correa de “lucky”, abro la puerta y nos adentramos. Ella se sienta en el sillón, pongo la cafetera y me dirijo a hacer el ramo de rosas blancas.

—Te ves diferente, conozco esa mirada —entrecierra los ojos—. Estás enamorada —lo que dice me hacen sonrojar, la veo de reojo.

—No creo Lily, es solo que hoy estoy feliz —me da una punzada en el pecho, pues no sé si es por Jimin o por qué cite a Nam el día de hoy, el sentimiento de culpabilidad se aloja en mi y se borra mi sonrisa.