La chica Fénix [EN EDICIÓN]

Los Dioses desterrados

Todo era desolado, tenebroso, es un lugar carente de magia, ninguno de ellos pueden utilizar, sus poderes de Dios estaban bloqueados por más que lo intentaron. No podían invocar nada, aunque solo Gea tiene conexión con la tierra y la naturaleza, ya que la vida de esta le da poder para vivir, en donde solo existían monstruos de la oscuridad, los dioses habitan, los dioses y titanes que intentaron derrocar a aquellos que dividieron sus mundos.

Gaia quería que los titanes volvieran al poder y no fue difícil convencer a los demás, todos con sed de poder no les importó traicionar a su propia familia, en caso de Seth fue fácil, ya que no se llevaba con sus hermanos y odiaba a Ra. Gaia dejó a un pequeño Dios fénix en los brazos del dios Ra que se encontraba desconcertado hasta tres días después que explotó la guerra con mucho dolor encerró a las personas que amaba en aquella cárcel.

No fue sorpresa para nadie que al pasar de los años más condenados fueran encerrados en aquel lugar incluso un grupo de humanos que se convertían en bestias en luna llena, la mayoría de ellos se ocultaban en un lugar lejos de los monstruos, los otros más sanguinarios se unieron al batallón de Gaia.

Todo cambio cuando la bruja Dinora entró en aquel sitio, siempre temerosa, huyendo de ellos por un tiempo, pudo escapar, pero no pudo, fue atrapada, querían saber por qué estaba ahí. Sabían que no era una condenada por los dioses, lo mejor fue cuando el hermano de la bruja quiso contactar con ella por medio de la magia oscura, fue una gran oportunidad para que Seth pudiera manipular a su antojo la mente de Demian y así hacer que los saquen de aquel sitio.

Y aunque no salió bien pudieron dejar espías en aquel mundo, y con ayuda de unos vampiros podrían volver en un futuro.