Rojo como la sangre, negro como la oscuridad

XXXVI

-Por supuesto, el negro es muy bonito- lo cojo y tras abrir la libreta comienzo a escribir algunos versos de Bécquer que más me acuerdo como la rima XXXVIII:

¡Los suspiros son aire y van al aire!

¡Las lágrimas son agua y van al mar!

Dime, mujer, cuando el amor se olvida

¿sabes tú a dónde va?

Aunque la rima XLIV es de mis favoritas:

Como en un libro abierto

leo de tus pupilas en el fondo

¿A qué fingir el labio

risas que se desmienten con los ojos?

¡Llora! No te avergüences

de confesar que me quisiste un poco.

¡Llora! Nadie nos mira.

Ya ves, yo soy un hombre….. y también lloro.

Si, al parecer tengo un poco de alma de poeta, aunque de escritora también, es como una manera de soltar en este tipo de situaciones mis emociones. Justo cuando me quedo mirando a la nada veo que Lily ya ha terminado y se sienta frente a mí y mira un poco por encima mi cuaderno.

-Escribes muy bien, me encanta tu letra, es enserio- se queda observando el cuaderno- por lo que puedo ver te gusta leer y escribir, ¿siempre has sido así?- me pregunta con curiosidad

-Que yo recuerde si, desde pequeña, mi madre siempre me ha inculcado lo que es la lectura y con el paso de los años me he estado refugiando en los libros de las bibliotecas como también los únicos amigos, ya que en el colegio se metían conmigo por no seguir el estereotipo “normal” que tienen o tenían muchos y pues me metía en las bibliotecas para imaginarme que soy alguien completamente diferente y la escritura a parte de para que otros puedan ponerse en la piel de mis personajes, pues la he tomado como una manera de expresar mis emociones cuando ni el baile, ni el dibujo me ayudan y con el tiempo he ido mejorando y hasta hace poco he empezado a inventarme algunos versos sueltos- le explico bajo su asombrada mirada

-Eres una caja de sorpresas Layra- sonríe antes de coger un libro que no me percaté que tenía entre sus cosas- te he traído este libro para que cuando te aburras puedas practicar algún hechizo, esto nos ayudó mucho a Angi y a mí cuando empezamos con la magia y como veo que tú vas mucho más avanzada de lo que estábamos nosotras a tu edad, creo que te va a venir bien tenerlo y creo que te gustaría quedártelo- me lo entrega, parece un cuaderno con la encuadernación de cuero negro, yo lo cojo y lo miro dudosa

-¿Por qué lo dices?-

-Tú sólo ábrelo y lo entenderás- eso es lo que hago y al observar la caligrafía, la reconozco de inmediato

-Mamá- susurro casi inaudible- esto lo hizo mi madre, ¿verdad?- observo que el resto de las páginas tiene la misma letra

-Si, ella nos hizo este libro para ayudarnos con nuestra magia y creo que le habría gustado que tú lo tengas también- veo sus ojos cristalizarse ligeramente

-Muchas gracias Lily, de verdad que lo valoro mucho- tomo su mano

-La echo mucho de menos, ojalá pudiese decirle y agradecerle por todo lo que ha hecho por mí- empieza a llorar

-Yo puedo decírselo, aunque creo que ya lo sabe ella- me mira confundida

-¿Cómo?-

-Ni yo misma lo sé, pero cuando a veces quiero estar con ellas, cuando estoy inconsciente o estoy dormida, es como que voy a otra dimensión donde están ellas y puedo hablarles y viceversa y puedo tocarles, es una cosa extraña la verdad, pero me hace sentir mejor, ¿tú crees que esto es normal?-

-Creo que de cierta manera sí es normal, hay algunas brujas que nacen con alguna habilidad que las hacen ser diferentes, eso únicamente ha pasado con las brujas realmente poderosas y por lo que hemos podido comprobar, tú eres una de ellas Layra, pero recuerda que tener un gran poder conlleva una gran responsabilidad-

-¿Es en serio?, esa frase es de Stan Lee, la usó para definir a Spider-Man- reconozco de inmediato la frase

-Pues no me acordaba, pero igualmente, tiene razón, por eso debes tener cuidado ya que a veces con el más mínimo error, puede ocurrir algo catastrófico, pero estoy segura que eso no pasará contigo- se levanta de la cama y mira la hora en su móvil- yo me tengo que ir ya, seguro que no van a tardar mucho en venir una de aquellas dos con tu comida- se acerca a la puerta y la abre- cuídate y aprovecha el libro- se va y yo abro el libro que tengo en mis manos y empiezo a leer las primeras páginas escritas por el puño y letra de mi madre y las primeras páginas tienen conjuros sencillos que logro hacerlos con facilidad, algunos como encender o apagar aparatos electrónicos hasta incluso he logrado cambiar mi ropa y ahora me encuentro leyendo como curar heridas superficiales hasta que llaman a la puerta y tras yo abrirla y cerrarla con magia escucho que Cordelia se acerca a la cama

-Hola peque, ¿cómo te encuentras?- sonríe mientras yo marco la página donde estoy leyendo y lo dejo a un lado

-La verdad es que bastante bien, he estado bastante entretenida con Lily y practicando algún hechizo del libro de mi madre- lo tomo entre mis manos

-Veo que la rubia al fin te lo ha dado- acaricia la cubierta del libro- recuerdo de ver a tu madre escribir este libro para aquellas brujas ya que de las tres, tu madre era la que mejor empleaba la magia y como ellas le dieron pena, pues les hizo este libro, ¿y cómo vas con los trucos- se sienta a mi lado