Pequeñas Pesadillas | Terminada

Dolor persistente

• Nahoya Kawata.

Viernes, 18 de marzo.

No puedo dormir, las incontables ganas de llorar me consumen, quiero desaparecer del planeta, fue un día tan estresante, estoy preocupado, las cosas no salen como yo quiero, mis planes son arruinados, mis papás me están regañando por todo. Sí, sé que ya estoy grande, pero la edad no quita el dolor en el pecho que un comentario mal intencionado puede generar, la edad solo es un número, no define nada de ti, y eso mis papás no lo entienden... Los amo, eso no cambiará, y el echo de que les responda con sarcasmo o con molestia no quita el cariño que les tengo.. No soy un mal hijo, solamente estoy cansado, quiero dormir pero no puedo, quiero despejar mi mente pero en ella solo hay problemas y discusiones.. Quiero darle un buen ejemplo a mi hermanito, pero ni en eso soy capaz..

Quisiera ser libre, no sabía que las personas que más te critican pueden ser tus mismos padres, es un dolor punzante y tortuoso en el medio del corazón. Uno no trata mal apropósito, uno está tan destruido mentalmente que ya ni siquiera quiere vivir, solo ansiamos poder escapar de la realidad tan cruel, buscando cosas para obsesionarnos, cada día teniendo una máscara diferente para afrontar las problemáticas.

Me molesta que mi papá use la psicológica conmigo, es un truco tan dañino, me echa la culpa de que souya es tan reservado, dice que porque yo me comportó como un loco; lo avergüenzo, Temo que mi hermano no confíe en mí, eso me derrumbaría definitivamente, tengo miedo de decepcionarlo como hermano mayor.

Souya me habló de sus pesadillas, y pienso que ambos debemos ir a un psicólogo, la familia no nos hace bien y en cualquier momento alguno de los dos va a decaer.. No puedo ser yo, necesito estar ahí para él.