Cuando desperté completamente solo en la cama, supe que algo no iba muy bien.
Para empezar, la cabeza me dolía como el infierno, me sentía débil y el mundo me daba vueltas alrededor.
Logré fijar la mirada en un par de luces pateadas que flotaban al otro lado de la habitación. Eso era raro, no deberían haber luces flotantes por allí, amenos... que no fueran luces...
Intenté enfocar mi visión, el mareo y dolor de cabeza no ayudaban para nada, pero finalmente lo conseguí... y sí, esas cosas no eran luces.
Ojalá hubieran sido luces, las luces flotantes misteriosas no dan tanto miedo como lo que de verdad estaba allí.
Artemis me miraba fijamente, y estaba enojada
—Arty... ¿Qué fue lo que...?
—¿Qué es lo que recuerdas?—me preguntó con dureza.
Intenté pensar en que responder, siendo sincero no tenia idea de a lo que se refería
—¿A qué te...?
—¡Lo último que recuerdas, ahora!
Su tono me hizo estremecerme, es decir, aún más. Me sentía débil y tenía frío a pesar de las mantas, las antorchas de la pared y del brillante sol que entraba por la ventana.
Me las arreglé para hacer memoria de lo ocurrido la noche anterior. Todo estaba borroso y confuso, pero lograba distinguir un par de cosas.
—Hubo una fiesta...—logré decir—. Apolo... Apolo me dió algo de beber y... no recuerdo nada más.
Artemis me perforó el alma con mirada, se notaba que estaba haciendo un esfuerzo monumental para contener la ira, la cual iba dirigida principalmente a mí.
—Te drogaron, Percy—dijo con seriedad.
—Apolo... voy a matarlo
Artemis se cruzó de brazos.
—Aunque estoy completamente de acuerdo, tenemos un asuntito más importante que atender.
Tragué saliva, me temía que podría haber sido, pero me negaba a creerlo. Aún así, el hecho de que no recordara en lo absoluto lo que había sucedido la noche anterior después de júntame con Apolo no me jugaba para nada a favor.
—Por favor dime que no hice nada malo... no lo hice, ¿verdad?
Ella me miró fijamente, aun de brazos cruzados, alzó una ceja y me analizó como si estuviera eligiendo el castigo más adecuado para mí.
—No, realmente estuviste muy tranquilo—me dijo—. Te sentaste en una mesa apartada y te quedaste allí por el resto de la fiesta.
Suspiré y me relaje, pero no mucho. El tono de Artemis me advertía que la cosa no había hecho nada más que empezar.
—Sí...—murmuró ella—. Te portaste bastante bien hasta que cierta chica se te acercó e intentó besarte.
Me escondí un poco más bajo las sabanas, sintiendo un terrible vacío en el estomago. No me creía capaz de haber hecho... no, no podía haberlo hecho, la lealtad era mi defecto fatídico. Era imposible que yo...
Negué aturdido y asustado con la cabeza.
—¿Y qué hice...?
Artemis seguía mirándome con total seriedad.
—Bueno... para empezar te apartarse de ella, la empujaste lejos de ti, le dijste que tenías novia, le mostraste una foto mía y le hablaste de lo maravillosa que era yo mientras decías que jamás podrías traicionarme.
Parpadeé confundido, eso se escuchaba bastante bien, pero Artemis seguía mirándome con ira.
—¿Y eso es malo por...?
—Porque esa chica que intentó besarte... era yo.
Primero, un largo silencio, después una sonrisa tiró de sus labios y se empezó a reír a carcajadas.
—¡Debiste haberte visto!—logró decir entre risas—. Todo el mundo lo vio, creo que Hermes aún sigue riéndose.
Yo realmente no recordaba nada de lo sucedido, pero la risa de Artemis era tan sincera que me contagié y empece a reír también. Fue un gran alivio después de estar casi muriéndome por dentro por el miedo.
Aun así, Apolo, estoy planeando mi venganza.
ESTÁS LEYENDO
Pertemis oneshots
FanfictionEl título lo dice todo, aunque más que subir oneshots voy a juntar todos los que ya tengo escritos en esta historia. Los personajes no me pertenecen