Supervivencia Zombie: El Comienzo

Silly World: Hell Evator

Está historia está en otro libro, llamado “Silly World”. Vayan a disfrutarlo. La historia no es canon con Supervivencia Zombie. Pero es una historia donde arreglo todos los errores de Supervivencia Zombie.

Historia alternativa:

—¡Tania!. —Grite mirando hacia ella.

—¿Que ocurre?. —Ella solo respondió, fumando un cigarrillo.

—¿Que demonios haces?. —Cuestioné. Para acercarme hacia ella, tomando del cigarrillo. Tirándolo por el balcón. Cayendo encima de un Zombie. —¡Lo siento!. —Grite.

—Si que eres un idiota. —Dijo Lixor. Tomando de un hacha. —¡Oye Alfonso!.

—¿Si?. —Mire hacia el. Demasiado confundido.

—¿Cómo iremos con Melissa y Paola?.

—No lo se. —Solo susurré, mirando hacia Lixor. Acercándome hacia Tania. —¿Tu sabes cómo llegar?.

—Si que estás idiota. —Me miro ella, dando un suspiro de la misma manera.

—¿Cuánto tiempo ha pasado?. —Lixor cuestionó.

—9 días. —De manera rápida respondí. —Pero... ¡Saldremos de aquí!. Lo sé.

—¿Si no lo hacemos?. —Me Cuestionó Tania, levantando una de sus cejas. Mientras tomaba de mi hombro.

—No lo sé, solo quiero estar juntos a ellos. —Me puse de rodillas, mirando hacia el cielo.

Las nubes se ponían totalmente obscuros. Comenzando a llover, solo empecé a llorar al ritmo que caían cada una de esas gotas de la lluvia. Mirando hacia abajo el charco, mirando como mi ropa estaba totalmente sucia, mi cabello despeinado. Cicatrices en mi cuerpo, mientras me miraba en la mano una pulsera negra. Lixor intento acercarse, pero Tania se lo impidió, estirando su mano hacia un lado, negando con la cabeza. Algunas voces saldrían de mi cabeza.

—¿Vamos a estar siempre juntos?. —Una voz femenina se escuchó.

—Esta es la cuarta vez que me dices eso, en esta semana. —Solo suspiré, mirando hacia adelante. Llenando mi cabeza de recuerdos.

Una chica con el cabello rubio, ojos azules claros me tomo de mis mejillas para acariciar de manera cariñosa, mientras yo solo me ruborizaba. Ella solo sonrió de manera dulce, cerrando de sus ojos inclinando su cabeza, dándome una amplia sonrisa. Solo susurré su nombre, sin llegar a más recuerdos.

—Meli...

Tania y Lixor, parecía que me escucharon. Solo limpie mis lágrimas, para levantarme del suelo. Dirigiéndome hacia la orilla del edificio, mirando como salía humos obscuros en la ciudad, mire con más detalle. Sonriendo de manera dulce.

—¡Nos vamos!. —Alze la voz, tomando el hacha de Lixor, abriendo la puerta, dándole una patada a un zombie, que estaba detrás de la puerta. Haciendo que caiga de las escaleras.

—¡Idiota!. —Alzo la voz Tania. —¡¿Para que carajos querías el hacha?!.

Solo la ignore, mirando como el zombie se retorcía, corriendo hacia mi. Mientras rápidamente hacia hacia un lado el hacha, tomando vuelo para golpear su cabeza con el filo, haciendo que quede pegado en la pared. Mientras sus ojos comenzaban a salir por el impacto. Sin que me importará, tome del hacha nuevamente. Bajando más abajo, tomando la perilla de la puerta.

—¡Espera idiota!. —Alzo la voz Tania, acercándose hacia mi. —¿Por lo menos sabes que lugar ir?. —Me cuestionó.

—Dónde están Paola y Melissa. —De manera rápida respondí.