-FOXXY- Sterek

Capítulo 3. Seguro

Los aullidos cesaron cuando los primeros rayos de luz se hicieron presentes. Seguía en esa pequeña cueva acurrucado el viento corría y estaba fresco temblaba por el frío. Pero no podía moverme se lo prometí a mi padre.

Se escucharon pasos alrededor de la cueva levanté las orejas feliz, asome mi cabeza pero no veía a nadie, volví a meterme cuando lo escuche de nuevo me arrastre y salí completamente de la cueva pero nada no había rastros de alguien. Gire para meterme de nuevo a la cueva cuanto alguien me tomo del lomo, chille y trate de soltarme.

-Mira lo que tenemos aquí una cría de zorro- lobos, abrí los ojos como platos.

-Hmm el señor Hale estará feliz de que le llevemos una cría no crees Jackson- un lobo café de color ojimiel asintió.

-Llévatelo Liam, hay que llevarlo a la manada- el lobo que me tenía retenido asintió y caminaron con migó en su hocico.

Lloriqueaba y lanzaba mordidas y zarpazos pero ellos solamente se reían al ver mis intentos fallar.

-Sí que es valiente esta cría eh- rieron yo no deje de luchar aunque sabía que no tendría oportunidad.

Seguía moviéndome frenéticamente para tratar de soltarme pero era inútil el lobo apretó más fuerte la mandíbula lloriquee a causa del dolor que me provoco. Vi que cruzamos la frontera sentí miedo chillaba y aullaba pero a causa de ser pequeño no se escuchaban muy fuertes.

Pude ver grandes madrigueras el olor a perro mojado y sangre me golpeo provocando que me alarmara. Los lobos seguían caminando hasta que llegamos a una madriguera muy llamativa. Aullaron los lobos mostrando su presencia ningún sonido hasta que la puerta se abrió dejando ver a un hombre alto y peligroso. Sentí mi corazón parar el aire se me escapo, le veía asombrado el sonrió provocando que temblara.

-Mira un sobreviviente- me tomo del lomo poniéndome frente a su rostro- Eres un zorro muy hermoso- me acaricio la cabeza con su otra mano- Enjáulenlo mañana lo usaremos para la selección- unos brazos me tomaron y pude ver que los dos chicos que me habían llevado ahí ya tenían forma de humano.

Caminábamos y los residentes de la aldea me veían como si fuera un peligro o un monstruo. Llegamos casi al extremo de la aldea donde no había ninguna casa alrededor solamente una pequeña jaula descuidada y oxidada. Un lobo de ojos azules abrió la reja y el que me sostenía me lanzo provocando que me golpeara con los barrotes en la cabeza haciendo que mi vista se nublara.

(...)

Todo debió haber sido un sueño si eso debería de ser, no recordaba mucho mi vista se nublo cuando me golpee con algo. Abrí mis ojos lentamente mi cabeza aun dolía debí haberme golpeado con alguna roca de la cueva. Acostumbre mi vista y no reconocí el lugar era helado y obscuro. Mire alrededor pero no había rastro de nadie o signo de vida. Levante la mirada y vi que era de noche, entonces recordé todo el secuestro los lobos, rápidamente busque una posible salida pero puede que la jaula tenga mal estado pero no tenía ni una sola abertura. Desesperado empecé a escavar en la tierra, mi padre me va a regañar por haberlo desobedecido. Seguía cavando lo más rápido que mis patas podían hasta que logre hacer un hueco lo suficiente ancho para poder huir de ese lugar. Me desplace por el lugar con facilidad una vez fuera corrí hacia el bosque aunque fuera la dirección contraria pero debía de salir rápido de ahí si no quería volver ser capturado.

Corrí, corrí y corrí hasta que mis patas no pudieron más jadeaba por el cansancio, busque un hoyo para descansar en él, caminaba lentamente tratando de recuperar la energía gastada por la corrida, además tenía demasiada hambre y mi madre no estaba para alimentarme. Me acurruque en el hoyo protegiéndome del frio de la noche solamente deseaba que fuera una pesadilla de la cual quería despertar, extrañaba a mi madre y a mi padre. Los extrañaba a todos no volveré a desobedecerles pero quiero volver a verlos.