Escena Extra | Día de San Valentín - HoSeok & Tate

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Tate, nena...

Ojalá que esto fuera más fácil para mí, pero estoy aprendiendo. Tú eres la única razón por la que siempre he querido celebrar este día. Ya sabes que me haces feliz. Sabes que te amo. Y sabes que te quiero cada minuto de cada día. Lo que no sabes es que me encantan las cosas pequeñas. No piensas que las noto, pero lo hago. Me encanta que una de tus uñas sea siempre de un color diferente al de las demás. Me encanta que no pones tu cabeza sobre mi hombro mientras estoy conduciendo sino que te sientas con tu espalada apoyada en la puerta del coche con los pies debajo de mis muslos, por lo que me puedes ver cuando hablamos. Me encanta que no eres una persona mañanera, pero siempre puedo hacer que te despiertes con una sonrisa. Me encanta la forma en que me recompensas cuando obtengo la respuesta correcta cuando estudiamos.

Y me encanta que no quiero volver a lavar tu olor fuera de mi ropa. Ayer, hoy, mañana y SIEMPRE. Te amo.

Ahora lleva tu culo arriba, estoy esperándote en el árbol.

HoSeok.

***

Tate

—¿Y dónde está HoSeok? —preguntó K.C. mientras apoyaba los codos sobre el mostrador y me miró.

Puse los ojos en blanco y volví a las filas de los zapatos de bolos que estaba guardando.

—Bueno, obviamente, ya que estoy trabajando, K.C., él no está aquí. Celebramos San Valentín ayer por la noche. —Metí los zapatos en sus cubículos, manteniéndome de espaldas a ella.

—¡GRRRR! Que delicada. ¿Qué pasa?

Poniéndome de pie, me sacudí el polvo de mis pantalones negros y di la vuelta para mirarla. K.C. trabajaba al lado en el cine, y yo había estado trabajando en los bolos desde noviembre. Ella hizo una rutina al venir los días en los que trabajaba, ya sea en los descansos o después de su turno. Como que me preguntaba si ella me visitaba con la esperanza de ver a alguien que no sea yo.

—Nada. —Me encogí de hombros y apreté mi cola de caballo—. HoSeok llevó a Kook fuera de la ciudad por un asunto familiar. —Hice una pausa para hacer comillas en el aire alrededor de "asunto familiar"—. Y me ofrecí a trabajar por Lacey, ya que ella quería que la noche con su novio. — Rápidamente miré a K.C. antes de apartar la mirada de nuevo, demasiado miedosa de que viera mi molestia—. Está bien.

—¿Está bien? —repitió con voz inexpresiva, como confirmando haber oído bien. Sus grandes ojos marrones me miraron con incredulidad.

—Sí. Bien. —La despedí y caminé por el pasillo detrás del mostrador. Estaba tratando de mantener la calma. Desde el otoño pasado, me di cuenta que tenía un, digamos, problema de ira. Tomé respiraciones profundas, empecé a hacer yoga y no traté de saltar a conclusiones. En este momento, me centré en el trueno de los bolos abalanzándose por su camino y el ruido de los pinos se estrellándose entre sí.

Me gustaban los bolos. Eran una tormenta constante. Oí a K.C. estampar su mano sobre el mostrador.

—Tatum Brandt. Tu novio se va fuera de la ciudad con el prostituto de su hermano en el día de San Valentín, nada menos, ¿y no estás incluso ligeramente molesta?

—¿Prostituto? Eso es bastante duro. —Sonreí y casi reí, olvidando mi ira por un momento.

Estaba equivocada. Kook no era un prostituto. No de la manera que HoSeok había sido, por lo menos.

Pero él estaba recibiendo mucha atención.

Ahora que HoSeok estaba fuera del mercado, las chicas de la escuela le dieron la bienvenida al nuevo Jung con los brazos abiertos y todo... abierto. Lo miraron como si fuera un juguete, algo con que jugar, y podría notar que eso cabreaba a Kook a lo grande.

Hasta Ti {F.A.S; #1.5} ➳ Jung HoSeokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora