Desde una historia de cuento de hadas, hasta lo más macabro que la retorcida mente de la autora pueda plasmar en estos cortos sucesos.
En este apartado se encuentran las historias de personajes provenientes de la saga "Crepúsculo".
Eres bienvenido a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Leah siempre fue una persona valiente, autosuficiente y atrevida.
Todos en su grupo de amigos lo sabían, su familia lo sabia, en resumen: todo el pueblo lo sabia.
Y entre todas estas personas estaba Mark Devine.
Un joven residente de Forks que compartía hogar con sus padres y hermanas.
Y resulta que cierta loba estaba muy interesada y al pendiente de lo que Mark hacia en su día a día.
Posiblemente se estarán preguntando el por que. Es fácil de explicar, para algunos dífil de entender, pero Leah había dejado su huella en Mark.
Al principio estaba confundida, ¿Ella pasando el resto de su vida con alguien? La verdad es que nunca se planto ni se imagino aquello. Ella era solitaria, a boca de sus amigos; amargada y reservada. Pero ella estaba dolida, y era su mecanismo de defensa.
Pero ella enserio quería ser feliz, ¿Podría ser Mark la solución?
Ella aun no lo sabia, pero aquel día que fue a la cafetería por un simple bocadillo, su vida cambiaria para siempre.
***
La campana que colgaba en el borde de la puerta sonó: dando a entender que un nuevo cliente había ingresado.
La chica escaneo el lugar en busca de una mesa disponible, encontrando una en la esquina del restaurante.
Tomo asiento y dejo sus cosas a la par. Ojeo el menú que estaba en la hoja, optando por un sándwich y una ensalada.
Un chico bastante atractivo vestido de camarero se acerco a Leah; quien al sentir el olor de su impronta dio una pequeña sonrisa. Entusiasmada por conocerlo.
-Bienvenida linda, soy Mark y te estaré atendiendo en tu estadía; esperando que sea larga.-Le guiño un ojo y sonrió. A pesar de que su jefe le dijo en varias ocasiones que dejara de coquetear con las clientas.
Leah levanto una ceja y dejo el menú encima de la mesa.
-¿Ese es el trato que le das a todos los clientes?- Hablo amena.
-Solo a las chicas tan bellas como tu.
-Okey Romeo, tráeme un sándwich de pollo tradicional, una ensalada numero dos, con ranch y una Coca Cola, por favor.
Mark anoto la orden y guardo la libreta en el bolsillo del delantal.
-Te lo traeré en un minuto, corazón.
El chico se dio la vuelta y se fue por el pedido.
Digamos que Leah estaba emocionada y sorprendida, nunca había coqueteado y para ser su primera vez haciéndolo no estaba nada mal.
Se dio cuenta que Mark era encantador y descardado. Algo muy diferente a ella, pero justo lo que faltaba en su vida.
Mark le llevo su comida y entre coqueteo por parte de ambos siguieron hablando un rato mientras Leah comía y Mark era regañado por su jefe al estar hablando y no trabajando; sacándole sonrisas a la loba.
Le dio el ultimo sorbo a su soda dejándola vacía al igual que su plato.
Lo pensó mucho, pero ya era hora de irse, su mamá la estaba esperando en casa y no queria preocuparla.
Saco dinero de su billetera y lo dejo sobre la mesa poniéndose de pie.
Desde el otro lado Mark veía como aquella chica se encaminaba a la puerta lista para irse.
Por alguna razón le entristecía la idea de que se fuera, por lo que se aproximo a ella y toco su hombro llamando su atención.
-Oh eres tu, ¿necesitas algo?
-En realidad si, me preguntaba si te gustaría salir conmigo. Ya sabes como en una cita.
El corazón de Leah revoloteo en su pecho, se puso un poco nerviosa, pero supo disimularlo.
-Claro, será divertido.
Mark sonrió, nunca había llegado tan lejos con una chica que realmente le gustara.
-Genial, ¿te parece el sábado?
-¿A las 10?-Pregunto Leah.
-Perfecto bonita, te recogeré en tu casa.
-Entonces te veo el sa.. pero no te he dado mi dirección.
-Tengo buenos contactos preciosa, toma-le extendió una servilleta con su numero en ella- mándame un texto y sabré que eres tu- metió las manos en las bolsas del delantal nuevamente y continuo con su trabajo.
Al salir del lugar Leah se quedo quieta, parada en el mismo lugar, pensando.
-Tengo una.. cita.-Hablo para si misma.
Sonrió y se dio la vuelta, viendo por el vidrio a Mark siendo regañado nuevamente por su jefe.
Una vez mas se burlo de el antes de irse del lugar.
Mark y Leah no lo sabían, pero ese era el inicio de toda una vida juntos.
N/A: Soy yooooooo. Lamento la desaparición, perdónenmeeee. En otras noticiassssssss. Este es el primer OS que hago de Leah y un chico. Qué tal? ¿Opiniones? ¿Sugerencias? ¿comentarios? ¿observaciones? Ando trabando en pedidos atrasados. Uno es de Jacob,entonces esperen ese OS pronto. Recuerden comentar.
